La pérdidas, de Aldo y de su libertad, es el pago de un indígena tlahuica, por su entrega a la defensa de la naturaleza
Con su hijo muerto por la causa de defensa a los bosques que le heredó, pedía la detención de asesinos y de los que integran la banda de talamontes. Incluso proponía programas que sustentaran la zona para crear empleo y que no hubiera excusa de los delincuentes por falta de dinero, aunque decía “no talan por necesidad sino por enriquecerse”.
Acusaba que la banda delictiva había tomado fuerza porque las dos últimas administraciones los dejaron crecer. Tenía identificada la hora en la que tumbaban los árboles: de la una madrugada hasta el amanecer. Pedía que acudiera el Ejército a vigilar y a todas las autoridades identificar que los talamontes también robaban autos.
El 20 de noviembre de 2015, Ildefonso estaba en su oficina del Palacio Municipal, como regidor del área de turismo y medio ambiente de Ocuilán de Arteaga, cuando fue detenido por policías ministeriales, quienes no le mostraron ninguna orden de aprehensión que existiera en su contra.
Una vecina lo acusó de haber ingresado a su casa a robar junto con otras personas, una testigo sostiene la versión, en tanto que la familia Zamora señala que ni siquiera estaba en la comunidad, ya que había acudido a una notaría pública en Toluca para recoger un acta constitutiva de una asociación ambientalista.
El 5 de febrero el Centro Miguel Agustín Pro Juárez, así como Green Peace, lanzaron una petición en línea para exigir mediante firmas y correos electrónicos a las autoridades del Estado de México desistirse de los cargos fabricados contra Ildefonso. Desde su encierro y a través de un mensaje de voz grabado, Ildefonso reconoce que le costó cara la pasión por conservar los árboles.
El campesino y defensor ambientalista fue liberado la noche del viernes, luego de nueve meses preso en el Centro Preventivo y de Readaptación Social de Tenancingo, Estado de México, acusado de robo a casa-habitación con violencia, que no le fue comprobado.
A su salida del centro de reclusión, Zamora agradeció a las organizaciones que lo apoyaron y a su familia: “Gracias por este apoyo, por el recibimiento a mi salida de este penal. Agradezco infinitamente todo el apoyo”.
Ildefonso recuerda que se encontraba en su oficina del Palacio Municipal, donde ejercía funciones como regidor de Turismo y Medio Ambiente, cuando fue detenido por policías ministeriales.
El 15 de mayo de 2007 sus hijos Aldo y Misael Zamora fueron atacados por un grupo de talamontes; en el atentado Misael resultó herido en un pulmón y Aldo perdió la vida. Fue hasta 2010 que detuvieron a dos de las cuatro personas que participaron en la agresión.