“Repensar el envejecimiento desde la perspectiva de los Derechos Humanos”

El envejecimiento se entiende como el proceso que inicia una persona en su nacimiento y termina con la muerte, en México 6 de cada 10 personas adultas son mujeres, haciendo evidente una feminización del envejecimiento, con una esperanza de vida promedio de 75 años, 78 años para mujeres y 73 para los hombres, lo que hace un sector social y económico vulnerable.

Situación que por razones de género coloca a las mujeres en mayor vulnerabilidad, debido a que muchas de ellas se dedicaron al cuidado de sus hijas, hijos y hasta nietos, o al cuidado de personas enfermas, además de las tareas domésticas; actividades no remuneradas que como consecuencia redundan en la falta de prestaciones de previsión social para atender sus enfermedades crónicas.

Como impacto de la vulnerabilidad, estudios de la Facultad de Estudios Superiores expresan que, en México el 47 por ciento de esta población vive en situación de pobreza y de entre el 20 y 30 por ciento sufre violencia física, psicológica, económica, abandono y/o despojo de su vivienda o propiedades, lo que afecta la tasa de crecimiento económico y del ahorro, a la propensión al consumo, al emprendimiento y mercados financieros.

Hechos que se convierten en grandes desafíos a nivel mundial que impulsaron a los países latinoamericanos y caribeños a la adopción del Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento en 2002, marcando un punto de inflexión en la forma en que los actores internacionales, regionales y nacionales abordan el envejecimiento y el bienestar de las personas mayores. 

El Plan identifica tres orientaciones prioritarias: 1) las personas de edad y el desarrollo; 2) el fomento de la salud y el bienestar en la vejez, y 3) la creación de un entorno propicio y favorable.

Al respecto, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) propuso la guía para la elaboración de informe país sobre su implementación, dando inicio formal los países de la región al proceso del cuarto examen y evaluación que tuvo lugar a nivel regional en 2022 y mundial para el 2023. El evento se llevó a cabo vía Zoom, registrándose 70 personas, de entre puntos focales de envejecimiento de 24 países de ALyC, y representantes del sistema de las Naciones Unidas.

El Director de la División de Población de la CEPAL destacó que según las proyecciones de las Naciones Unidas, las personas de 60 años y más en la región sumaban alrededor de 85 millones y representaban el 13 por ciento de la población total estimando que este grupo etario alcanzaría los 190 millones para 2050, lo que representa del 25 por ciento de la población regional. 

Añadió que el grupo de personas de 80 años y más que crecía con mayor dinamismo triplicaría su proporción en los siguientes 30 años, al pasar del 2 al 5.5 por ciento, y en 2050 llegaría a alcanzar un total de 41.5 millones de personas.

Por lo que enfatizó la necesidad de llevar a cabo acciones urgentes y de visibilizar y repensar el envejecimiento desde las perspectivas de derechos humanos, género e interculturalidad, para incidir en las políticas públicas. Así como examinar los progresos sobre las personas mayores y el desarrollo, el fomento de la salud y bienestar en la vejez, y, la creación de entornos propicios y favorables.

¡Repensemos el envejecimiento!