Si el acuerdo de un alto el fuego entre Ucrania y Rusia firmado recientemente en Minsk fuera violado, Europa podría adoptar nuevas sanciones contra Moscú. Aseguraron a dúo la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, durante la rueda de prensa conjunta a última hora de la mañana de ayer tras la reunión que ambos mantuvieron en París. Una reunión que sirvió sobre todo para preparar la cumbre del G7 que en junio se celebrará en Elmau, sur de Alemania.
Grecia y Ucrania fueron los asuntos que dominaron el encuentro. Reiteraron su rechazo a una posible salida de Grecia del euro e insistieron en que los acuerdos de Minsk se tienen que respetar, advirtiendo que si no habría consecuencias. “Estamos más convencidos que nunca de que deben aplicar los acuerdos de Minsk”, subrayaba Hollande, destacando que en el pasado “el alto el fuego ha sido violado varias veces, pero ahora debe respetarse plenamente, debe respetarse la retirada de las armas pesadas y la liberación de prisioneros, enfatizaba. Preguntado específicamente sobre la posibilidad de sanciones adicionales contra Rusia, el presidente indicó rotundo: “Cualquier país que no respete los acuerdos de Minsk estará sujeto a sanciones”. (Agencias)
