“Cuando eres joven crees que eres una persona que puede hacerlo todo. Piensas que podrás controlar tu manera de beber y drogarte. Todo comienza con diversión. Estás acompañado de muchas personas que dicen ser tus amigos. Después terminas enfermo y solo”.
Entreviste a una persona adicta a las drogas y al alcohol. Cuenta que comenzó a los 14 años. La primera droga que recibió fue por parte de amigos con los que comenzó a convivir. La mayoría de la gente con la que se juntaba era mayor que él. En reuniones era muy normal encontrar todo tipo de drogas que le ofrecían y por diversión fue consumiendo. En esa época no tenía novia y solamente quería tener amigos y era un mundo nuevo que “explorar”. No sabía de las consecuencias que esto le traería.
Su nombre es Hermilo “M” y amablemente compartió su historia con Diario Plaza Juárez: “comienzas consumiendo y probando poco a poco diferentes drogas, que acompañadas con alcohol hacen un coctel perfecto”. Tu familia no se percata hasta que pasan varios días y no saben nada de ti porque andas drogado y es cuando saben que algo ocurre y se desatan los problemas.
Su primera experiencia internado en un “nexo” (lugar para rehabilitar personas adictas)
“En mi caso me llevaron a internar a un nexo a puerta cerrada en contra de mi voluntad. Cada lugar es diferente y los servicios que te proporcionan son los que tu familia tiene para pagar. Yo tenía tres comidas al día y una cama que compartía con un compañero. Para bañarme me daban un bote de agua fría y durante seis meses permanecí con ex convictos y ex adictos, que son quienes cuidan el lugar”.
“Mi primera experiencia al llegar al centro de rehabilitación. Me lavaron los pies. El significado que le daban era que iban a terminar con mi sufrimiento. Esto como representación de la iglesia. En algunos lugares utilizan la fe, alguna religión o doctrina. Me aseguraron que yo estaría en un lugar donde me sacarían adelante. Pero uno se desespera. Estar encerrado y las consecuencias de que te tengan en abstinencia. No es algo fácil. Comienzas a sudar frío. Mientras comienzan a quitarte poco a poco la adicción, te ponen suero con vitaminas en la enfermería. No te quitan por completo el consumo, te van dosificando en el tratamiento alcohol y algunas drogas para que no sea de golpe”.
Cuenta que a su familia le hicieron firmar una carta responsiva donde se hacen cargo de las instalaciones que pudiera dañar y de las consecuencias que se presenten mientras luchan contra la adicción. Queda establecido que no se hacen responsable si el paciente se escapa.
Buscando ayuda en más lugares… sin éxito
“Estuve en ese y varios lugares más, ya no recuerdo el número. De todo me sucedió, Conocí los lugares más horrorosos que te puedas imaginar, donde te golpeaban. Estuve a punto de caer en la cárcel, por drogarme. Y es que ocurre que no sabes lo qué haces cuando estas drogado. Fueron muchos los hospitales por sobredosis, viviendo en la calle sin un peso para comer pero nunca me faltó quién me ofreciera un trago o algo para drogarme.
Traté de reivindicarme y hacer una vida normal. Busque un trabajo. Me casé con una muy buena mujer con la que tuve un hijo, pero las drogas tuvieron más peso en mi vida, por lo que los perdí.
Las drogas te dejan, sin familia, trabajo dinero y mucho menos amigos porque nadie quiere convivir con una persona así.
Tengo 31 años y me dedico a manejar un tráiler. La mayoría del tiempo me paso pensando si consumir o no y a pesar de que me preguntan si cambiaría de trabajo para dedicarme hacer otra cosa, pero la verdad es que ya es cuestión personal; tengo compañeros traileros que se la pasan manejando y cuando se sienten fatigados se orillan en algún lugar para descansar sin tener que drogarse como yo que tengo dependencia lo hago porque es algo que me exige mi cuerpo.
¿Cuál es el mensaje que les das a los jóvenes para que no cometan los mismos errores?
En este momento de mi vida, les diría a los jóvenes que tienen la inquietud de probar las drogas y consumir alcohol mi testimonio. Tal vez los puede ayudar. Las consecuencias de las adicciones son muy graves. Es muy difícil vivir en la incertidumbre. Busquen apoyo e información para salvarse de ser un enfermo. La afirmación de que las adicciones son progresivas y mortales no es sólo una frase.