Los restos de un recién nacido perteneciente -presuntamente- a la civilización de la que provenían los hunos han sido hallados en Siberia
Un grupo ha hallado los restos de un bebé momificado accidentalmente hace 1.500 años que podrían ayudar a completar la escasa información que existe sobre la cultura Bulan-Kobinskaya.
«Los restos son de un bebé. Creemos que tenía menos de un mes de edad o que era un recién nacido. Cuando el pequeño fue enterrado, el «ataúd» de piedra en el que le introdujeron (el cual impidió que entrara el aire) y la mortaja de cuero en la que fue envuelto provocaron que sus restos se momificaran sin pretenderlo.
Junto a él fueron hallados los cuerpos de dos adultos. «El niño fue enterrado en un montículo separado entre los dos cuerpos, probablemente sus padres». Su estado de conservación es envidiable, pues aún mantiene tejido corporal blando y fragmentos de la mortaja de cuero.