CINE DE HOY
Seleccionada para inaugurar el nuevo concepto de salas de artes de Cinépolis, la más reciente cinta del chileno Sebastián Lelio, Desobediencia, se acaba de estrenar en la Cineteca Nacional.
El guión del propio realizador y Rebecca Lenkiewicz viene a completar la trilogía sobre mujeres que inició con Gloria y la oscareada Una mujer fantástica.
La exitosa fotógrafa Ronit Krushka (Rachel Weisz) se entera de la muerte de su padre, el rabino Rav (Anton Lesser), durante una sesión de trabajo en Nueva York.
Aunque no se encontraba en los mejores términos con su progenitor, Ronit decide viajar a Tel Aviv, a presentarle sus respetos.
Pero su llegada produce conmoción en la comunidad judía, en donde gran parte de ellos, ni siquiera sabía que el rabino tenía una hija.
El discípulo de Rav, y viejo amigo de Ronit, Dovid Kuperman (Alessandro Nivola) le da asilo.
Para sorpresa de Ronit, se entera de que se ha casado con Esti (Rachel McAdams).
Y es que el motivo por el cuál huyó la fotógrafa, es que tenía una relación amorosa con la chica, y el reverendo las había descubierto.
Pese a sus reticencias, Esti reanuda el romance con Ronit, ante el escándalo de los conservadores judíos.
Lelio se mueve como pez bajo el agua con personajes femeninos al límite.
Ahora cuenta con un reparto internacional en su primera película en inglés.
Disobedience resulta pues una buena cinta, que al igual que sus antecesoras provocará gran polémica.
