
Que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, respete la decisión de las comunidades a no construir el Libramiento Ixmiquilpan, obra que ya se ha presupuestado, pero que es rechazada por la población afectada.
La Unión de Pueblos Indígenas que integra a las localidades afectadas de los cinco municipios, ganó la consulta que realizó el gobierno federal, donde se rechazó la construcción de este libramiento, que tendría una inversión de dos mil millones de pesos de inicio.
Si el Presidente de México no respeta los acuerdos de estas comunidades y se continúan con los trabajos topográficos y presencia de funcionarios del gobierno federal, los pobladores estarán tomando otro tipo de medidas de orden social, advierten.
La obra, arrancaría en el tramo de La Lagunilla en el municipio de Santiago de Anaya y cruzaría además, San Salvador, Chilcuautla, Ixmiquilpan y Tasquillo, donde estaría la desembocadura, según el trazo.
Aunque no existe una legislación respecto a la consulta, el acuerdo con el gobierno federal fue que se aplicara en todas las comunidades, bajo los principios de usos y costumbres, a mano alzada, triunfando el rechazo a la obra.
El próximo 26 de junio, en la comunidad de Xuchitlán, se llevará a cabo un convivio de todas estas comunidades, para celebrar el primer año de su movimiento, asimismo para festejar haber ganado el rechazo a esta obra millonaria.