Londres.- Estados Unidos decidió suspender el programa para entrenar y armar a la llamada oposición moderada siria. El programa, dotado con 500 millones de dólares, no logró crear fuerzas terrestres de combate capaces de enfrentarse a los yihadistas del Estado Islámico (EI). Los resultados en Siria no han sido los esperados, han informado dos responsables del Gobierno estadounidense.

El proyecto, que se inició formalmente en diciembre, buscaba equipar a los rebeldes que, en las actuales circunstancias, son considerados “moderados”, para luchar contra el yihadismo. También era un intento de apoyar a estos grupos, que luchan tanto contra el EI como contra el régimen de Bachar El Asad en un conflicto que dura ya cuatro años y que se ha cobrado más de 300.000 vidas.

El mes pasado, el programa tenía solo “cuatro o cinco” participantes combatiendo en Siria, según fuentes de Defensa. Una cifra alejada de las previsiones del Pentágono, que esperaba preparar a un máximo de 5.400 combatientes de este año y 15.000 en los próximos tres años. Las docenas que están recibiendo instrucción actualmente acabarán esa formación y se ubicarán en los grupos rebeldes sirios para mejorar su efectividad en el combate, según las autoridades.