
EFE.- Los ríos de lava que recorren la vertiente oeste de la isla de La Palma en dirección a la costa sepultarán comunicaciones terrestres, eléctricas y telefónicas y crearán una lluvia ácida cuando, en las próximas horas, lleguen al mar.
Así lo explicó el catedrático de Geología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria José Mangas, quien detalló que las coladas de esta erupción de tipo estromboliano, caracterizada por pequeñas explosiones de materiales en estado pastoso, que suceden en pocos minutos u horas, acompañadas por derrames de coladas de lava, arrastran varios metros cúbicos de lava por segundo.
El efecto de este fenómeno es la creación de diversas lenguas de lava de varios metros de ancho que van sepultando a su paso carreteras, viaductos, tendidos eléctricos y telefónicos y fundiendo las tuberías de pvc de las conducciones de agua potable, ya que la lava avanza a unos 1.100 grados de temperatura.
“Es como una apisonadora, para volver a habilitar las carreteras se necesitarán explosiones, no se podrá con excavadoras”.