Hidalgo vive una crisis grave por la desaparición del maguey, es un error histórico, el cual se pretende enmendar mediante la participación del gobierno del estado, los ayuntamientos y los propios productores. En la región de Alfajayucan, Chapantongo y Nopala, se busca que se produzcan en este año un millón de plantas que serán reintegradas a los terrenos.
El Secretario de Desarrollo Agropecuario de Hidalgo (SEDAGRO), Carlos Muñiz, calificó como gravísima la situación que se vive en la entidad, donde las plantas de maguey han desaparecido y las políticas públicas que se pusieron en marcha para atender esa problemática han sido muy pobres de resultados.
Explicó, que existen municipios netamente magueyeros como: Apan, Almoloya, Tepeapulco, Emiliano Zapata, Singuilucan, Epazoyucan o Zempoala, donde la crisis está más asentada, aunque existen casos como El Cardonal que es un ejemplo a nivel estatal respecto a la conservación de la planta.
“Hoy solamente hay un municipio que se salva en este estado, que es El Cardonal, que es un ejemplo del cultivo del maguey”. “Fue un error histórico, fue un error de cálculo, cuando a nuestros viejos les avisaron que la cerveza se vendía bien y el pulque ya no daba, lo que hicieron fue devastar millones de plantas para sembrar cebada”.
Explicó, que el maguey está recuperando su valor, pues todo lo que produce tiene una favorable aceptación en el mercado y a buen precio. “Todo lo que produce el maguey es 100 por ciento comercializable, tiene buen valor el mercado, el error fue histórico”.
Agregó, que existe un decreto y una ley de protección para esta planta, sin embargo son insuficientes, para lo cual, la SEDAGRO ha dispuesto a su área jurídica para revisar las normativas y hacer una propuesta al Congreso desde esta secretaría, donde se establezcan penas severas, pero también sea facilitadora para la comercialización del maguey.
Tiene que ser dijo, un tema de alerta y de una política de Estado, debido a que esta planta está en proceso de desaparición, donde el problema más grave es que la población, asimismo las instituciones no “le quieren entrar” por lo tardado que es la producción.
