Ante la presencia del material, del que se debe contar con un permiso específico para su manipulación, se dio parte a la Secretaría de la Defensa Nacional y estos a su vez al Ministerio Público Federal para que investigue la procedencia del material explosivo.
Llamada anónima alertó a los cuerpos policiacos sobre el hallazgo de explosivos en una canaleta ubicada a la orilla del Arco Norte, a la altura del kilómetro 78, con dirección a Querétaro, por lo que el área fue acordonada por elementos de Protección Civil y Bomberos de Tlahuelilpan, del Ejército Mexicano y la Policía Federal.
Ángel Barañano Guerrero, director de Protección Civil de Tlahuelilpan, informó que recibieron el reporte de la presencia de artefactos explosivos a la orilla de la autopista, por lo que se trasladaron al lugar y que al llegar efectivamente en una pequeña canaleta estaban abandonados dos explosivos de los llamados “salchichas”.
De inmediato procedieron, sin manipularlos, a verificar de qué tipo de explosivos se trataba, percatándose que eran dos salchichas de los denominados “Unigel”, los cuales son utilizados para la explotación de materiales en las minas, pero que al faltarles el detonador no representaban ningún riesgo para los automovilistas que circulaban por la zona o la población en general que pudiera estar laborando en las milpas aledañas.
Barañano dijo además que se hizo contacto con la empresa expendedora del material “Explosivos Mexicanos S.A. de C.V” con la finalidad de conocer a quién le fue vendido el material.
Más tarde, personal del Ministerio Público Federal arribó a la zona y una vez que realizaron la diligencia, el personal especializado del Ejército Mexicano decomisó el material explosivo, mismo que se presume llevaba varios días en el lugar abandonado.