Tula de Allende
Gran controversia generó la instalación de la Feria del Juguete en las principales calles del primer cuadro de la ciudad, el Gobierno Municipal intentó suspenderlo, sin embargo los comerciantes, quienes señalaron que ya habían realizado gastos, incluido el pago de piso, se negaron a retirar sus puestos, por lo que se colocaron alrededor de 300 negocios.
La mañana del 4 de enero el Gobierno Municipal informó que con las medidas sanitarias establecidas por la Secretaría de Salud Estatal y la Comisión para la Protección de Riesgos Sanitarios de Hidalgo (Copriseh), se aprobaba la instalación del Tianguis el Juguete y que se llevaría a cabo con puros comerciantes de Tula.
Dijo que no se permitiría el acceso a menores de edad, adultos mayores y mujeres embarazadas. Sin embargo, durante la madrugada se emitió un nuevo comunicado en el que se precisó que el Tianguis del Juguete quedaba suspendido en atención a los lineamientos emitidos por la autoridad estatal a través de las medidas sanitarias publicadas en el Diario Oficial del Estado.
El gobierno local dijo que se buscaba evitar aglomeraciones y reducir el riesgo de contagios durante la segunda ola de la propagación del virus de Covid, debido a que el semáforo epidemiológico se mantiene en rojo en Hidalgo y desde luego en Tula de Allende.
Al ignorar los comerciantes el comunicado de la no instalación, obligó que el alcalde Manuel Hernández Badillo, recorriera cada uno de los puestos para invitar a los comerciantes a hacer conciencia sobre el tema de salud y pedirles su retiro.
Les hizo hincapié en que no se haría uso de la fuerza pública, pero que apelaba a la comprensión de los comerciantes con el retiro voluntario y así privilegiar la salud.
Cabe hacer mención que a través de las redes sociales las posturas fueron encontradas; unas a favor de la instalación de la Feria del Juguete para no afectar la economía de los comerciantes y por otro lado hubo quien calificó la autorización en primera instancia como un desacierto, lo que derivó en el desacato.
Finalmente un importante sector de la población se pronunció porque ese tipo de actividades ya dejen de realizarse en el primer cuadro de la ciudad, al generarse un tremendo caos vial que desquicia la circulación.
