Los precios de la carta incluyen propinas e impuestos
- Los dueños de restaurantes y bares tratan de equiparar los sueldos de camareros y cocineros
En Seattle, donde entró en vigor en abril la primera fase de una ley que establece un sueldo mínimo de 15 dólares la hora, las marisquerías Ivar’s pasaron a tener una carta con todo incluido. Bob C. Donegan, presidente y copropietario, calculó que podía aumentar los salarios de todo el mundo subiendo los precios un 21% y acabando con las propinas.
Seattle.- Los propietarios de restaurantes, clientes y empleados se quejan desde hace tiempo de la tiranía de las propinas, pero al igual que una aventura amorosa que sale mal, ha demostrado que es difícil acabar con ella. Hoy en día, empujados por una avalancha de nuevas propuestas de salarios mínimos en ciudades importantes, un número cada vez mayor de dueños de restaurantes están imponiendo normas para eliminar las propinas como forma de contener el incremento de los costos laborales.
En Seattle, donde entró en vigor en abril la primera fase de una ley que establece un sueldo mínimo de 15 dólares la hora, las marisquerías Ivar’s pasaron a tener una carta con todo incluido. Bob C. Donegan, presidente y copropietario, calculó que podía aumentar los salarios de todo el mundo subiendo los precios un 21% y acabando con las propinas. “Vimos que existía una desigualdad básica en nuestros restaurantes, en los que la gente que trabajaba en la cocina cobraba aproximadamente la mitad que la gente que trabajaba de cara a los clientes en el comedor”, explica Donegan.
No muy lejos, The Walrus and the Carpenter estableció una propina obligatoria del 20%. En Manos Nouveau y en Sous Beurre, ambos en San Francisco, los precios de la carta incluyen propinas e impuestos. Dirt Candy, un restaurante de lujo en Nueva York, añade un recargo administrativo del 20%.