ALFIL NEGRO
El día de ayer 5 de septiembre fue el primer día en lo que se refiere al poder para dos hidalguenses: JULIO MENCHACA Y OMAR FAYAD. Para Menchaca para empezar a vivir todos los días durante seis años con el saludo de “Señor Gobernador” porque es y será su realidad en tanto dure su sexenio, que tiene como todo encargo de poder, un inicio que es este 5 de septiembre y un final el 4 de septiembre del 2028, y también es el primer día para Fayad que termina su encargo como gobernador, y es desde el primer minuto del 5 de septiembre “ex gobernador” de nuestro estado. Dos realidades distintas, pero las dos dentro de lo que son las reglas del juego del poder.
EL PRIMER DÍA para quien deja el poder debe ser un amanecer distinto a lo acostumbrado durante seis años en que todos los días como depositario del poder en Hidalgo, era informado a buena hora de la situación que guardaba la entidad, y consultado para decidir en razón de la importancia de los hechos, en que los demás funcionarios no podían ni debían decidir por la gravedad e importancia de lo que se presentaba.
Desde luego quien se encargó de su agenda le hacía presente desde un día antes los compromisos que se tenían a efecto de estar a tiempo y preparado.
Reuniones, giras de trabajo, audiencias para recibir a ciudadanos y atención subrayada para la gobernanza del estado en que La Paz y tranquilidad fueron preocupaciones diarias, con estrategias diseñadas para ese fin.
Días intensos de trabajo y de preocupaciones y de poder sin duda alguna.
Pero el 5 ya fue distinto, ya no fue como los otros de gobernador. Por primera vez ya no decidía desde la gubernatura la vida del estado por una razón elemental, ya no era el hombre del poder.
Y desde días antes empezó a notar cosas raras, sobre todo de gentes que en su momento eran omarista a morir y que ahora de pronto ya no lo eran, y aventuraban opiniones para criticar su gestión, o por lo menos para dejar claro que ellos vaya ni lo conocían. LUIS SPOTA ese estupendo escritor mexicano a quien los santones de las letras en México criticaron porque escribía libros que no dejaban de ser solo bet seller, por la gran cantidad de venta que tenían, y a los que les negaban valor literario, abordó el tema del poder en una serie de novelas que llamó “costumbre del poder“ de la que forma parte importante EL PRIMER DÍA, en que narra lo que es la vida después del poder para un Presidente de la República y la ingratitud y la soledad en que tiene que vivir y preguntarse “¿Dónde están los hombres y las mujeres que él había hecho ricos y poderosos en los años de poder que habían terminado esa mañana?.
La historia de siempre, como con OMAR que seguramente pudo hacerse esa pregunta ante un nuevo escenario en que ya no había poder.
Ahora y eso se vio en la toma de posesión de Menchaca, los saludos ya no eran para Omar sino para Julio porque uno tenía poder y el otro ya no.
En cuanto a JULIO MENCHACA también fue su primer día, que con toda seguridad no fue como todos los otros, porque ya era el gobernador que provoca que muchos le descubran virtudes que antes al parecer no tenía y ya uno le abrazaba, otro le pedía una foto mientras otro aprovechaba para alguna petición y la mayoría se confirmaba con una mirada del nuevo hombre del poder.
Los días de Menchaca van a ser distintos sin duda alguna, pocas horas tendrá libres y serán jornadas muy fuertes de trabajo y organización porque el reto así lo exige.
Así es esto del ejercicio del poder desde la gubernatura.
Un primer día que con seguridad no se olvida nunca .
Y que no olvidarán ni Julio ni Omar.
