Las locuras del liberal Macri y sus consecuencias
- La devaluación por la liberalización del control de cambios amenaza con avivar más la inflación; tuvo que intervenir el banco central para que no llegara el caos
Entre los que apoyaban al rival kirchnerista de Macri en las elecciones, Daniel Scioli, hay diferencias. El economista Mario Blejer opinó que la liberalización del cepo cambiario “es un paso en la dirección correcta”, pero el exministro de Economía Axel Kicillof la descalificó por considerarla una “devaluación”.
La Argentina del liberal Mauricio Macri eliminó ayer el cepo (control) cambiario que rigió durante todo el segundo Gobierno de la peronista Cristina Fernández de Kirchner (2011-2015) y el peso sufrió una devaluación del 30%.
El dólar oficial subió de 9,83 pesos el miércoles a 15 en el inicio de la jornada bancaria, lo que suponía un alza del 52,5%, pero después bajó a 13,95, por intervención del Banco Central, con lo que la subida se redujo al 41,9%. Hasta el día anterior, los ciudadanos y las empresas en Argentina podían comprar una cantidad limitada de dólares en el mercado formal y con autorización.
Entre los economistas reinaba un consenso de que debía eliminarse el control de capitales y devaluarse el peso, dado el estancamiento de la inversión, la economía y la creación de empleo en los últimos cuatro años, pero la discusión radicaba en el ritmo al que tenía que producirse. El temor es que la inflación, de por sí alta (24% anual hasta octubre), suba demasiado y eleve la pobreza (21%).
“Esto tiene aroma a los 90”, opinó el líder sindical peronista y antikirchnerista Hugo Moyano, en referencia a la década en la que Argentina aplicó política económica neoliberal. “Espero que no le hayan sacado el cepo al dólar y se lo quieran poner a las paritarias”, añadió Moyano, que en los últimos meses se acercó a Macri e incluso influyó en nombramientos en el Ministerio de Trabajo. “Los trabajadores no estamos dispuestos a perder poder adquisitivo. Apenas asumió [el poder] el nuevo Gobierno no tuvo dudas en sacarle los impuestos al trigo, al maíz, a la carne, pero sí tuvo dudas en sacarle el impuesto perverso que es el mínimo no imponible (IRPF) al aguinaldo [salario navideño]“, añadió el líder sindical.