Home Región El peligro de cocinar chicharrón de puerco y puerca

El peligro de cocinar chicharrón de puerco y puerca

0

Comerciantes del tradicional tianguis de los jueves y establecidos en el centro de Tulancingo, se llevaron tremendo susto ese día, cuando las llamas en el techo de una carnicería salieron a relucir debido a la distracción de un empleado cuando hacía chicharrón prensado.

El incidente se suscitó en la esquina de la avenida 21 de Marzo y callejón del Progreso, a donde llegaron elementos de Bomberos y Protección Civil para la atención; sin embargo, el propio empleado ya había sofocado el fuego, ayudado por comerciantes vecinos.

 

Para evitar riesgos mayores, elementos de Tránsito y Vialidad y Seguridad Pública, acordonaron el lugar y retiraron por un momento a los comerciantes, mientras los vulcanos realizaban una revisión del lugar, con la finalidad de evitar una segunda deflagración que pudiera extenderse a otros locales o puestos semifijos.

 

Paramédicos de Cruz Roja Tulancingo atendieron al joven Sergio Franco Vázquez, de 22 años de edad, empleado de la carnicería que en su labor de controlar el fuego, sufrió quemaduras leves en sus manos y rostro; por lo que fue trasladado a un nosocomio local para su valoración médica.

 

De acuerdo a la versión del director de Bomberos, comandante Jesús García Ávila, el joven empleado sufrió un descuido mientras se daba a la tarea de hacer el chicharrón, en una zotehuela ubicada en la parte superior del local de carnicería; lo cual provocó las llamas que afortunadamente sólo alcanzaron unas láminas.

 

García Ávila informó que realizó la revisión correspondiente de las instalaciones y no se percató de alguna otra anomalía, por lo que aprobó el retiro del acordonamiento y liberación de la circulación en la calle 21 de Marzo.

 

Aseguró que constantemente se hacen operativos de verificación de las instalaciones tanto de locales como puestos semifijos que utilizan fuego para manejo de alimentos, con la intención de evitar este tipo de incidentes.

 

El accidente se presentó poco después de las ocho de la mañana, por fortuna.  No era hora pico y algunos comerciantes ya habían concluido con el descenso de su mercancía; lo cual permitió el acceso inmediato de los servicios de emergencia.