#DEPORTE EN MÉXICO
• Esta iniciativa se presentó durante la gestión del presidente Adolfo López Mateos (1958-1964); el documento emitido por la Cámara de Senadores propuso que primera tenencia de la historia
Existe en México la creencia popular del vínculo entre el cobro de la tenencia con el financiamiento de los Juegos Olímpicos celebrados en nuestro país en 1968. Sin embargo, la indignación por este cobro ha reproducido esta historia que no es más que un mito. Esta iniciativa se presentó durante la gestión del presidente Adolfo López Mateos (1958-1964); el documento emitido por la Cámara de Senadores propuso que primera tenencia de la historia se pagara en 1962, poco más de un año antes de que México presentara su candidatura en para la Olimpiada ante el Comité Olímpico Internacional (COI). Cuando México ganó la sede, en 1963, ya se había pagado la tenencia dos veces como parte de la disposición del artículo 13 de la Ley de Ingresos de 1962, donde se menciona que el impuesto sería pagado anualmente, jamás se dice que sería temporal o que tenía una vigencia. Y la justificación no era financiar algo en específico, sino la de cobro tributario para el mejoramiento de infraestructura. Algo que sí es cierto, es que el impuesto ayudó a solventar la justa olímpica de 1968. En total, según el reporte financiero final del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos, el costo ascendió a los 2 mil 198 millones 800 mil pesos, mismo que se cubrió en la década de los setenta. Para los ochenta el impuesto agregó aviones, yates, motocicletas, helicópteros y hasta esquíes acuáticos. Por lo que se convirtió en una de las formas de recaudación tributaria más importante de nuestro país, sumado a que el parque vehicular de México no ha hecho otra cosa que más que crecer en los últimos años. Para 2012, en el sexenio de Felipe Calderón, se sugirió la eliminación total de la tenencia pero no sucedió. La ley cambió en 2012 y el impuesto pasó de federal a local dando la facultad a los estados de decidir si la cobran o no.