CONSEJO ESTATAL DE POBLACIÓN
• La edad promedio al momento de casarse en los hombres fue de 27.4 años por 24.1 de las mujeres
El 14 de febrero, Día de San Valentín, data de la época del Imperio Romano, por el año 270 de nuestra era. En esa época, bajo el reinado del emperador Claudio II, había un sacerdote en Roma llamado Valentín; el emperador prohibió a los jóvenes casarse y vivir en matrimonio porque pensaba que solteros y sin familia serían mejores soldados al no tener compromisos a la hora de ir a la guerra. El sacerdote Valentín consideró injusto el decreto dictado por el emperador, por lo que comenzó a celebrar en secreto los matrimonios de los jóvenes enamorados. La rebeldía del cura fue descubierta, por lo que se le encarceló y sentenció a ser decapitado el 14 de febrero.
Con motivo de la celebración del 14 de febrero, establecido como Día del Amor y la Amistad, el Consejo Estatal de Población (Coespo) presenta un conjunto de indicadores seleccionados sobre situación conyugal de la población hidalguense, así como datos y estadísticas de matrimonios y divorcios en el Estado de Hidalgo.
Durante el año 2016 se registraron 9 mil 982 matrimonios y 2 mil 463 divorcios según Estadísticas Vitales de INEGI.
La edad promedio al momento de casarse en los hombres fue de 27.4 años por 24.1 de las mujeres. En 2016, la tasa bruta de nupcialidad (matrimonios por cada mil habitantes) en el territorio hidalguense fue de 3.42.
En 2016, se registró para las mujeres por grupo de edades, de los principales rangos que más se casaron fueron de 20 a 24 años con el 27.5% de los enlaces; 25.5% de 25-29 años y 14.2% de 30 a 34 años; en los hombres el rango más común para contraer nupcias fue de 25 a 29 años con el 26.8%, seguido por el grupo de 20 a 24 con 22.2% y en tercer lugar el grupo de 30 a 34 años con el 17.6%.
Del total de personas que contrajeron nupcias según su escolaridad, el 1.1% de los hombres no tenía escolaridad; con primaria incompleta 1.5%; 9.1% contaba con primaria completa; 26.6% secundaria o equivalente; 20.4% preparatoria o equivalente; 24.1% estudios superiores y 17.3% no especificaron su escolaridad. En el caso de las mujeres 1.2% no tenían ninguna escolaridad; 1.4 con primaria incompleta; 6.9% primaria completa; 24.3% secundaria o equivalente; 22.9% preparatoria o equivalente; 26.1% estudios superiores y 17.1% no especificaron su grado de escolaridad.
De cada 100 hombres que se casaron, 95 trabajaban al momento de contraer nupcias, de éstos el 45.7% eran empleados; el 11.5% obreros; el 11.2% trabajadores por cuenta propia; 8.9% jornaleros o peones; el 0.4% patrones o empresarios; el 0.5% trabajadores no remunerados y el 21.7% no especificaron su posición en el trabajo.