Con el sonar de las sirenas, entre aplausos y lágrimas, rindieron tres sentidos homenajes a Salvador Mendoza Hernández quien perdió la vida en cumplimiento de su deber y de quien se reconoció fue un hombre entregado a su labor por salvaguardar la vida de los demás, “sin importar arriesgar su propia vida, como fue el caso de que el pasado domingo por la noche acudió atender el servicio de una fuga de combustible derivada de una toma clandestina”.

El cortejo fúnebre de Mendoza Hernández, luego de ser velado en el domicilio de sus padres, ubicado en la colonia Los Fresnos, salió para ser trasladado en el camión de bomberos para dirigirse al municipio de Atitalaquia, donde fungió como subdirector de Protección Civil.

Ahí el gobierno municipal encabezado por la presidenta municipal María Antonieta Herrera Jiménez, a través del área de Protección Civil y Bomberos, lo despidió con todos los honores al reconocerlo como un héroe, por haber entregado su vida al servicio de los demás.

María Antonieta, antes de entregar a su esposa e hijos el lienzo del Lábaro Patrio, expresó su más sentido pésame a los deudos; dijo que Salvador Mendoza  fue un hombre que dedicó su vida para salvar vidas y que se iba como un héroe por su desempeño, labor y compromiso, agradeció el que haya trasmitido a sus compañeros sus conocimientos y recalcó que no era un elemento improvisado.

Por su parte, a nombre de la familia del elemento caído, en cada uno de los tres homenajes, hizo uso de la palabra su padre, Salvador Mendoza Calderón, quien agradeció las muestras de afecto y cariño para con su hijo, de quien, con un nudo en la garganta, recordó que fue un hombre que en todos los servicios para salvar las vida de los demás, entregó su alma, corazón y en el último, hasta su propia vida.

Dijo que Salvador llevaba un gran estigma de servicio herencia de su abuelo, quien también fue socorrista, y de su demás familias que se ha dedicado a servir a sus semejantes.

Mendoza Calderón pidió a quienes ha seguido la noble labor de pertenecer a los cuerpos de auxilio, que no dejen de capacitarse para ser excelentes en su ramo, ya que entre más preparación tengan, tendrán mayor seguridad de sobrevivir en cualquier contingencia.

A la sociedad les pidió valorar el trabajo de los bomberos y de todos los cuerpos de emergencia, ya que muchas ocasiones sin contar con las herramientas de trabajo, se enfrentan a las contingencias.

En Atitalaquia, como en Tula, los directores de Protección Civil y Bomberos, Uriel Solórzano y Eliseo Segura, respectivamente, resaltaron el trabajo de entrega de Salvador Mendoza y quien, además, se distinguió por ser un buen hijo, esposo, hermano y amigo.

Ya en Tula, el alcalde Ismael Gadoth Tapia Benítez, al encabezar el homenaje en la corporación de Protección Civil y Bomberos, también emitió un mensaje en el que  mencionó que existían sentimientos encontrados, pero que Chava fue un hombre solidario y comprometido, y que con su labor trascendió al haber dejado la vida misma en su labor. Dijo que la muerte de Salvador lastima a toda la población y que el mejor homenaje es ser mejores ciudadanos para no exponer la vida de los demás.

En la Cruz Roja, donde sirvió como paramédico prehospitalario, también le rindieron merecido y consternado homenaje. Se emitieron varios mensajes, entre ellos el del presidente del patronato, Raúl Sicilia Alamilla.

Por último, como parte de los sentidos homenajes se recalcó: “Serviste con voluntad y honor y fuiste más allá del deber, hasta el extremo de dar tu vida. Honor y Gloria a ti, Salvador Mendoza Hernández”. Se ofició una misa de cuerpo presente, celebrada en la Catedral de San José, y después fueron llevados y depositados sus restos en el panteón de Los Olivos.