Anticipa posible salida del ministro por discrepancias con el ultraderechista mandatario, Jair Bolsonaro
El secretario de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud de Brasil, Wanderson de Oliveira, renunció ayer y anticipó la posible salida del titular de ese despacho, Luiz Henrique Mandetta, en conflicto con el presidente Jair Bolsonaro por el COVID-19.
Oliveira es un hombre clave del equipo formado para el combate al coronavirus SARS-CoV-2 y quien, al igual que Mandetta, ha enfrentado a Bolsonaro y defendido las medidas de restricción de la circulación de personas para frenar al virus, a las que el mandatario se opone.
De Oliveira envió una carta a otros funcionarios del ministerio, en la cual escribió que “infelizmente, ha llegado el momento de la despedida”. Agregó que el martes tuvo una reunión con Mandetta y que “su salida está prevista para las próximas horas o días”, pero que no era posible determinar cuándo “será el momento exacto”.
Sin embargo, anticipó que pudiera ser a través de “un anuncio respetuoso” por parte de Bolsonaro o “por el Twitter”, el medio que el mandatario suele usar para muchos anuncios importantes, incluida la dimisión de ministros.
En la carta, De Oliveira considera que “la gestión de Mandetta se acabó”. Las tensiones entre Bolsonaro y Mandetta comenzaron hace semanas y se agravaron al mismo ritmo que el coronavirus se ha expandido por el país, donde ya hay 1.557 fallecidos y 25.758 casos confirmados de COVID-19.