Los Tuzos y Felipe Calderón
Solo falta que Jesús Martínez, acompañado por el sencillito Andrés Fassi, salga a declarar ante aficionados que “haiga sido como haiga sido”, ya se colaron a la fiesta grande del fútbol mexicano, es decir a las rondas de final. Lo cierto es que debería darles vergüenza presumir que están en las finales, igual que al ex presidente cuando “ganó” la elección presidencial. Porque de no llegar o llegar bajo este esquema perverso, en que los equipos más mediocres se meten a la liguilla luego de campañas miserables, sería honesto que renunciaran a esa posibilidad y exigir un esquema no sólo más justo sino simplemente honesto. Esa es la razón de que en nuestro país se practique un fútbol tan patético y condenado al fracaso. Pachuca no merecía estar en las finales y lo está. Los únicos beneficiados son los bolsillos de los empresarios, los negociantes del deporte más popular y hermoso, pero también más prostituido, al menos en México.
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Como último recurso, llamar cobarde al contrario
Elección tras elección se repite: candidatos y candidatas de partidos de “oposición”, recurren a un viejo y socorrido estilo para intentar ganar adeptos. En un evento público, conferencia de prensa, donde se pueda, se dan a la tarea de calificar como cobarde al abanderado del Revolucionario Institucional que declina acudir a un debate que sería todo, menos debate. Es decir que aceptar un reto de este tipo, trampa es la palabra, sólo le restaría puntos a la ventaja amplia que lleva, y le abonaría a quienes desde la otra esquina buscan a toda costa provocarlo para aceptar un debate absurdo en todo el sentido de la palabra. Quien se ve en la necesidad de retar a media plaza al contrario, es porque ya la ve perdida; porque ni con ocurrencias ni críticas lapidarias a obras, ha podido remontar el marcador. Es decir que, entre más necios y necias se pongan en esto del debate, es porque ya cayeron en la cuenta que la desventaja que tienen es abismal, de tal modo que sólo con un nocaut estarían en posibilidades de vencer. Y no, la democracia no pierde porque no se haga un debate. Si acaso pierde quien ya entró en plena desesperación.
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Aguante, ya mero terminan las campañas
No son pocos los que se quejan del bombardeo de propaganda política en cine, radio, televisión y periódicos. Simplemente ya no aguantan tantas sandeces dichas por personajes de diferentes colores pero mismo corazón. El hartazgo conduce a la incredulidad, y a estas alturas ya nadie cree nada de nada. Lo bueno es que ya están por terminar. Usted aguante, como quiera dos semanas y un poco más se pasan rápido. Como quiera no es de por vida esto que padecemos. Ya pasará, ya pasará…
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Rodolfo Palma, en la mira del Santo Patrono
Primero lo hizo con Percy Espinoza, más conocido como Pinocho. El líder de los trabajadores del municipio de Pachuca obedeció fielmente al Santo Patrono, y le tundió con todo al alcalde Eleazar García Sánchez. La orden había sido dada en reuniones nada secretas, y por el contrario todo mundo sabía y sabe que el titiritero de Pinocho Percy es el Santo Patrono. Después decidió que era tiempo de ir por el delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Rodolfo Palma, que cometió el pecado de no oponerse a las obras de la Plaza Independencia como lo había ordenado el Santo Patrono. Y fue en ese momento que el sindicato del INAH le cayó como anillo al dedo. Así que la guerra continuará. El Santo Patrono mueve una vez más los hilos de sus títeres.
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