OTRA QUE SE VA DEL PRI. – Ahora resultó ser Adriana Flores, la que anunció que deja las filas del Revolucionario Institucional para unirse a las filas de Movimiento Ciudadano, en busca de mejores horizontes, luego que esperó, esperó y esperó, hasta que finalmente se cansó, luego que ya no vio nada claro en el horizonte tricolor, donde se repartieron las plurinominales como si fuera el bolo del padrino de bautizo. Lamentable, pero es la cruda realidad es que igual de lo que se quejó, sucedió en MC, donde ya la hicieron aspirante al Senado, así nomás, sin respeto a la militancia, que, por lo que se ve, no respetan en ninguna parte.
ELEAZAR Y LA ELECCIÓN. – Por supuesto que, en esto de las peleas por el poder, cada cual jala luz para su santo, pero sin duda, lo fundamental es que, si hubo algún delito, se pruebe, se compruebe y se castigue. En eso no hay, ni debe haber ninguna duda. Porque resultaría lamentable, terrible, que, por asuntos electoreros, la politiquería que menciona el presidente López Obrador, se cayera en la tentación de cargar con el ex alcalde, de siglas E.E.G.S., y querer noquear al que quiere ser, de siglas B.R.M., nomás por el quemón que esto puede representar para su partido. El hecho es que, como dice el artículo 4, numeral 2 de la Constitución: “toda persona se presume inocente, mientras no se demuestre lo contrario”. El asunto va para largo, y por lo mientras Pachuca ya atrae todos los reflectores.
CRECEN Y CRECEN LOS CASOS DE INFLUENZA. – Nunca nos cansaremos de decirle que se vacune, que acuda al centro de salud más cercano y ponga una barrera en contra de la influenza, porque el número de casos crece, y la posibilidad de que haya más difuntos también. No es chiste, no lo tome por esa vertiente. Es momento de que hagamos algo por nosotros y nos cuidemos. Insistimos porque está en juego la vida de usted, de quien ya es de edad y ha decidido no cuidarse. Es momento.
VIOLENCIA EN LA REGIÓN TULA. – Nadie, en su sano juicio, aspiraría a ser candidato de cualquier partido a la presidencia municipal de Tula de Allende, o de Atotonilco de Tula. El problema de la violencia es real, no es invento, y quien le entre deberá ser con todo, porque para miedosos no hay terreno. Complicado, porque toda esa región, que, por supuesto incluye Tepeji del río, registra un índice complicado de crímenes, sean o no de los organizados o desorganizados.
Aviso para que no digan: Esta columna se nutre de comentarios recabados por agencias del Recontra-Espionaje, muy similares a las que popularizó el “Súper Agente 86” en sus tiempos. Como tal lo que publicamos puede que sea cierto, puede que no, o todo lo contrario. Está usted en libertad de creer o no lo que lee, recontra-enojarse, recontra- carcajearse y hasta recontra-recordarnos a nuestra jefecita (nosotros recontra-haremos lo propio). Avisado está usted.
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