#BOX
“Canelo” Álvarez todavía no calienta a Nueva York
• Canelo” no subió la temperatura de la cartelera. No lo hizo él, ni tampoco su rival Fielding, alguien tan afable que ni siquiera se molestó porque el mariachi interrumpió la música de Rocky
Lo que se suponía sería el entrenamiento público de Saúl Álvarez en el Madison Square Garden resultó en un besamanos para el mexicano con un puñado de aficionados que acudieron a ver de cerca al boxeador que el próximo sábado podría convertirse en triple campeón mundial en diferentes categorías si vence a Rocky Fielding.
Con pantalones deportivos y sudadera negra, “Canelo” bajó por unas escaleras eléctricas acompañado por la música de mariachi y los gritos de sus fans que a decir verdad no eran más de 100. Cualquiera de los locales más famosos de donas y café de Nueva York tenía más gente en espera a esa hora, que Álvarez en el Garden.
En una ciudad que no se detiene por nada ni nadie, el Canelo no se movilizó arriba del ring. Subió, dirigió unas palabras más desabridas que el guión para un actor de reparto en una telenovela y volvió a bajar del encordado sin tirar un solo jab, ni saltar la cuerda.
”Es un reto para mí (pelear una división arriba), voy a subir a la zona de confort del campeón. El boxeo es de tomar riesgos y estoy muy contento por eso. Estoy listo para hacer historia”, dijo Álvarez, un discurso tan repetido como las pastorelas.
”Canelo” no subió la temperatura de la cartelera. No lo hizo él, ni tampoco su rival Fielding, alguien tan afable que ni siquiera se molestó porque el mariachi interrumpió la música de Rocky con la que entrenaba. El inglés parece es como un turista que ganó un viaje a Nueva York todo pagado y lo está disfrutando.
”Estoy motivado de estar en Nueva York con mi familia. Me hubiera gustado entrenar con mi música, pero tampoco me molestó”, comentó Fielding.
En el entrenamiento que no fue entrenamiento, los únicos que sudaron fueron los fotógrafos y camarógrafos por capturar algún momento del “Canelo”.
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#DEPORTE RÁFAGA
Los Bulls confían en embestir, tras juego en México
Los Bulls confían en que la visita a México sirva de trampolín para lo que resta de temporada de la NBA, en la que son el peor equipo de la Conferencia Este, con seis victorias y 22 derrotas. Chicago disputará su primer juego en territorio mexicano cuando enfrente al Magic de Orlando en la Arena Ciudad de México. ”Nos encontramos bien, tuvimos un par de prácticas que nos relajaron, ahora México nos ayudará, porque pasaremos más tiempo con los compañeros de equipo, algo que no sucede mucho en Chicago”, señaló Lauri Markkanen, estelar del conjunto. Zach LaVine confesó sentirse agradecido por tener la oportunidad de jugar en México, al ser algo que no sucede con frecuencia. “Escuché que la Arena se pintará de color rojo y blanco”, dijo el joven de 23 años de edad. “Venimos hasta acá para ganar y recuperar la confianza”.