Ale Romero Bonilla, destacada atleta hidalguense a nivel internacional, realizó una transmisión en vivo a través de su página personal de Facebook, en el cual se dijo estar indignada, “no como atleta, sino como ciudadana tulancinguense”, debido a la clausura del restaurante de su madre, ubicado en el centro de Tulancingo; a pesar de llevar dos años tratando de regularizar este negocio familiar, con papeleo, y vueltas y vueltas a presidencia municipal, según narra en dicha transmisión.

En el video, Romero Bonilla asegura que ella y su familia han hecho trámites “más de lo que legalmente se pide”, sin embargo, acusa que se ha hostigado a su mamá, la señora Esperanza Bonilla, ya que en una semana se le impusieron cinco multas a este negocio.

“El día de ayer (sábado) amedrentaron a mi mamá con la fuerza pública. Eso ha rebasado los límites, es algo innecesario y responsabilizó a Viridiana Hernández (directora de Reglamentos) por lo que pueda pasarme a mí y a mi familia”.

En su narración explicó que desde el 14 de diciembre del 2017 ella y su familia están realizando el trámite pertinente para regularizar dicho negocio, y que hasta el momento, solo falta una firma de la directora de Reglamentos; sin embargo, de alguna u otra forma, se ha negado a otorgarla.

“Es una vergüenza que utilicen sus influencias. Quiero disculparme ayer con la gente que se encontraba en el restaurante porque llegaron armados y no es una imagen que queremos que se llevan de Tulancingo”, subrayó.

Ale Romero aseguró que la directora ya había empeñado su palabra en que esto ya estaba resuelto y que era cuestión de días para que se liberara el permiso.

“Si no se me apoya deportivamente, por lo menos que dejen trabajar el negocio de mi familia”, dijo en relación a su carrera deportiva, y aseguró que nunca ha pedido un favor al municipio, aunque reconoció que en dos ocasiones se le ha apoyado dos veces, con cantidades irrisorias.

Calificó como vergonzoso que esté pasando esto en su municipio. Dice estar enojada porque han intentado llevar el proceso  de la mejor manera posible, “el presidente se comprometió personalmente conmigo a ayudarme a terminar con todo este peregrinar”.

Enfatizó en señalar que su queja es ciudadana, y ni siquiera está reclamando que no se le apoya deportivamente. A pesar de que no existe ese apoyo, asegura que se le perjudica con no otorgar los permisos que se tienen que dar para que el negocio funcione.

“Presidente, yo no le pedí ningún descuento, ningún favor, el trámite se ha hecho más de cuatro veces, y sin embargo no se ha podido, no sé a quién más se pueda recurrir, mi familia y yo no somos delincuentes”.

Agregó que la directora de Reglamentos aseguró que pasaría el documento faltante a la dirección de Licencias y Permisos, el pasado miércoles, pero no lo hizo así y procedió a clausurar el pasado sábado.

Finalmente, antes de pedir apoyo y asesoría a las personas conectadas, Ale Romero acusó corrupción de fondo e intereses extraños en esta situación.