- Varias explanadas y avenidas alrededor del recinto se han habilitado para la oración
- El presidente, Recep Tayyip Erdogan, firmó hace dos semanas el decreto que anuló el estatus de museo
EFE.- Decenas de miles de personas participaron ayer en el primer rezo musulmán en la antigua basílica de Santa Sofia, convertida este mes en mezquita tras una decisión del Gobierno islamista turco.
El acceso al templo de Estambul quedó restringido a unas 500 personalidades invitadas por el Gobierno, pero varias explanadas y avenidas alrededor del recinto se habilitaron para un rezo al aire libre.
El presidente, Recep Tayyip Erdogan, que participó en la oración, firmó hace dos semanas el decreto que anuló el estatus de museo, otorgado al edificio en 1934.
El jefe de la Diyanet, Ali Erbas, conduce el rezo, al que han sido invitados personalidades no solo de Turquía sino también extranjeras.
Se esperaba la participación de, al menos, los jefes de Estado de Qatar y Azerbaiyán, pero su presencia no fue confirmada oficialmente.
Erdogan visitó el jueves el lugar con una comitiva y descubrió la nueva placa que identifica el monumento como “Gran Mezquita de Santa Sofía”.
Tres horas previas al rezo, enormes altavoces colocados ante el monumento lanzaron cánticos del Corán a todo volumen sobre la plaza, donde esperaron, bajo sol inclemente, miles de hombres, desde adolescentes a barbudos ancianos que participaron en la oración.
