CINE DE AYER
En esta ocasión vamos a hablar de “El tigre de Yautepec” presentada en el ciclo dedicado a Fernando de Fuentes por los 50 años de la Cineteca Nacional, presenta algunas curiosidades
Filmada meses después de “El prisionero 13”, pero antes que la obra maestra “El compadre Mendoza”, “El tigre de Yautepec” presentada en el ciclo dedicado a Fernando de Fuentes por los 50 años de la Cineteca Nacional, presenta algunas curiosidades.
El guion del propio director y de Jorge Pezet se inscribe dentro de la corriente de obras como “Astucia” y “Los bandidos del Río Frío”.
El pueblo de Yautepec es atacado por una banda de delincuentes llamados Los chacales que se llevan a uno de los principales hombres del pueblo y a su hijo, ante la impotencia de doña Lupita (Adria Delhort), quien los da por muertos.
Pasan veinte años y las cosas no han cambiado mucho. Ahora es la banda de “Los plateados” la que asalta al pueblo, bajo el mando del temible Tigre (el torero Pepe Ortiz).
Ante la falta de apoyo del gobierno Doña Lupita ha organizado las fuerzas de autodefensa comandadas por Andrés (Joaquín Busquets) quien pretende a Dolores (Lupita Gallardo), que se ha enamorado del Tigre, sin saber que se trata de su propio hermano.
La cinta tiene un principio prometedor con vistosas tomas y paisajes einstenianos, pero poco a poco cae en el melodrama, con la relación incestuosa y las consabidas canciones.
La captura del bandido es tratada con una torpe elipsis que seguramente decepcionó a los espectadores.
“El tigre de Yautepec” resulta, pues, una simple curiosidad, que permitió a De Fuentes afinar su técnica, para filmar dos años después su obra maestra “¡Vámonos con Pancho Villa!”.
