CINE DE HOY
La crítica cinematográfica en nuestro país no tiene los alcances que en otras naciones. Eso queda de manifiesto con La vida misma, un espléndido documental de Steve James exhibido en la Cineteca Nacional y en el Centro Cultural Universitario.
La cinta gira en torno a las memorias de Roger Ebert un crítico norteamericano fallecido el año pasado.
Se trata de un testimonio bastante conmovedor del realizador de Hoop dreams los últimos meses de vida del periodista nacido en Chicago que luchó varios años contra un cáncer en el esófago que le impedía, ya no digamos hablar, sino siquiera comer sólidos.
Pero al mismo tiempo es un filme muy gozoso, que transmite el amor al cine que tuvo este periodista, que se puede vanagloriar por haber sido el único que obtuvo el Premio Pullitzer por su trabajo.
Al lado de cineastas reconocidos como Martin Scorsese, Werner Herzog y Errol Morris que hablan de su relación con el autor de Life itself, se recoge el testimonio de jóvenes cineastas poco conocidos que fueron alentados por sus críticas.
Además resulta muy divertida la parte dedicada a su programa televisivo, en la que sostenía acalorados debates con su contraparte judío sobre clásicos como El padrino, Tiburón y muchas cintas más.
Hay que hacer mención especial a su relación con su esposa Chaz, quien se convirtió en su pilar durante los últimos años de su vida.
Life itself resulta pues un filme altamente recomendable que hay que ver sin falta, aunque no se dedique a la crítica cinematográfica.