Tula de Allende
- Dice no estar en contra de esos espacios, “pero cuando estratégicamente su meta de clientela son alumnos… es cuando se actúa mal”
El bar “La Milenaria”, ubicado en la carretera Tula-Tepeji Km. 61.5 Nueva Santa María, obtuvo una licencia a nombre de Fernando Alfonso Ávila Hernández, director de Comunicación Social del gobierno del Tula de Allende
Leodan Portes Vargas, rector de la Universidad Tecnológica Tula-Tepeji (UTTT), con respecto a la apertura de más bares en las inmediaciones de la institución educativa, como el más reciente con razón social “La Milenaria”, dijo que no está en contra de esos espacios, pero que cuando estratégicamente su meta de clientela son alumnos, es cuando se actúa mal.
Cabe recordar que en días pasados asambleístas del PRD entregaron a los medios de comunicación copia de la licencia de funcionamiento del bar “La Milenaria”, ubicado en la carretera Tula-Tepeji Km. 61.5 Nueva Santa María a nombre de Fernando Alfonso Ávila Hernández, director de comunicación social del gobierno del Tula.
Tras la expedición del documento, de fecha 3 de septiembre del 2015, acusaron tráfico de influencias y tacharon de mentiroso al alcalde, Jaime Allende González, quien había negado categóricamente la autorización de ese tipo de establecimientos.
Portes Vargas señaló que no está en contra de la diversión sana “No digo que todos los bares sean malos, pero el asunto es cuando estratégicamente se piensa que su público meta sean alumnos es cuando se actúa mal”.
En entrevista, concedida en su oficina de rectoría, dijo que una de las mayores vulnerabilidades que enfrentan los jóvenes es precisamente caer en ciertos vicios que les impidan o les modifiquen su desempeño académico, “Pero no solamente es el desempeño académico, sino más bien es una descomposición social y aquí es algo paradójico, porque la sociedad es lo que está provocando”.
“Y si entonces la sociedad no cuida a su juventud qué hacemos, éste no es un asunto de la Universidad… en contra dé, la sociedad también tiene que levantar la mano, la universidad no es la única que debería de decir que no se abran ese tipo de negocios”, sentenció el catedrático.
Señaló que los vecinos y la sociedad son quienes deben proteger a la juventud… al darse cuenta que la autoridad no lo está haciendo.
Recalcó que con la apertura de centros de vicio no sólo se daña a los estudiantes de la UTTT, sino a la población en general hombres y mujeres y que en esos casos la sociedad tiene que hacer lo que le toca, porque la institución ya hizo lo que le corresponde de inconformarse porque no le gusta que eso suceda, porque vulnera a los jóvenes.
Leodan Portes recordó que existen suficientes problemas en la sociedad y la región como para que se le sigan apostando a algo más, comentó: “afortunadamente no hemos tenido mayores problemas, pero una cosa lleva a la otra y las estadísticas dicen que la incidencias delictivas van de la mano con las lesiones provocadas por accidentes provocados por la ingesta de alcohol”.
La sociedad tiene que tomar cartas en el asunto sobre si se debe de abrir un antro de esa naturaleza.
Al cuestionarle sobre sí él, como catedrático, pondría un negocio de esa naturaleza dijo “Desde luego que no porque no sería congruente y entonces mi calidad moral dónde queda, es decir no podemos estar en la oportunidad del negocio como lo único que me interese en la vida, tenemos muchos problemas cuando alguien pone en el máximo pedestal el dinero y entonces eso significa que el objetivo justifica cualquier medio y eso no puede ser”.
Finalmente, el rector puntualizó que todos (TODOS) debemos ser congruentes, incluida la sociedad, porque lo que se busca en los jóvenes es crear una fortaleza de desarrollo, bajo la mística de que el hombre requiere de buena alimentación, buena educación y de buena salud integral humana ambiental de sus emociones y espiritualidad y mientras esto no se impulse es más fácil caer en vicios.
Sobre la veracidad del documento que entregaron los asambleístas el director de Reglamentos y Espectáculos, Adolfo Álvarez Templos, dijo que era real y que el número de folio 2073 obraba en los archivos del área a su cargo.
Para conocer el punto de vista del director de Comunicación Social, Diario Plaza Juárez acudió a su oficina con la intención de conocer su postura referente a las acusaciones de los asambleístas. La respuesta fue: NO TENGO NADA QUE DECIR AL RESPECTO”.