Controlan ya más de la mitad del Alepo rebelde

Rusia ofrece negociar la salida de los insurgentes mientras se intensifican los combates

Las milicias rebeldes sirias defienden desesperadamente en las últimas horas su feudo de Sheij Said ante los embates de fuerzas de élite del régimen. Si cae este estratégico barrio del sureste de Alepo, el frente insurgente amenaza con desmoronarse.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos confirmó que en la noche del viernes al sábado el avance gubernamental arrolló las áreas rebeldes de Tariq al Bab y Al Tab, en el noreste de la dividida urbe.
Las fuerzas leales al presidente Bachar el Asad controlan ya más de la mitad de los distritos de la parte oriental de la ciudad que estaban en manos de la oposición el 15 de noviembre, cuando arrancó la actual ofensiva. Desde entonces se han contabilizado 307 civiles muertos, entre los que figuran 42 niños y 22 mujeres.
Los que parecen ser los últimos días del Alepo rebelde se suceden bajo continuos bombardeos de la aviación del régimen y en medio de fieros combates casa por casa. Pese al masivo desplazamiento de civiles durante la ofensiva —cerca de 30.000, según Naciones Unidas, y más de 50.000, de acuerdo con el recuento de los informadores del Observatorio sobre el terreno–, la comunidad internacional no ha conseguido hacer llegar ayuda humanitaria.
Rusia ofreció el jueves abrir corredores en el frente para auxiliar a la población de la parte oriental de la ciudad y evacuar a los heridos graves. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha insistido en que Naciones Unidas puede enviar sus convoyes con seguridad. La ONU, sin embargo, aún no ha establecido si hay garantías suficientes para ello, y su mediador para Siria, Staffan de Mistura busca “fórmulas para impedir la terrible batalla [final] por Alepo”. Lavrov dijo ayer que estaba dispuesto a negociar con EU la salida de los insurgentes del asedio.

Related posts