La bajada de San José, también conocida como la “Bajada de la muerte”, donde se realizan trabajos de mejoras por parte del gobierno del estado de Hidalgo, ha generado malestar y preocupación en la ciudadanía tulancinguense, sobre todo por la incertidumbre respecto al funcionamiento de los nuevos retornos.
De acuerdo al gobernador, Francisco Olvera Ruiz, estos trabajos tendrían que terminarse a finales del mes de mayo; sin embargo las obras avanzan a marchas forzadas.
Actualmente, se presenta un conflicto en la zona conocida como “La Preferida”, donde prácticamente se está renovando uno de los retornos, lo cual provoca un cuello botella en el tránsito vehicular, sobre todo para quien se dirige hacia Pachuca o a la Ciudad de México.
Cabe mencionar que esta bajada de San José consta de 6.2 km de longitud, y hasta el momento, se colocaron 400 luminarios de súper LED.
Estas obras, en su totalidad, alcanzan una inversión de 15 millones de pesos, aproximadamente; además, en este tramo se modernizan cinco retornos considerados de alto riesgo, y serán instalados también, según anunció el secretario de obras públicas, Jesús Romero Quintanar, 80 semáforos de alta tecnología, así como 400 señalamientos y pantallas.
Durante algunos lapsos del día, la situación se torna conflictiva debido a estas obras, ya que el asfalto está siendo retirado, sobre todo en la zona de los retornos, con la finalidad de eliminar el espacio que regularmente era utilizado como retorno, es decir, pegado al carril de alta velocidad.
Ahora los retornos serán por la extrema derecha, situación que deberá tomarse en cuenta, ya que significará cierta dificultad para los tulancinguenses acostumbrarse a ello; debido a que el carril de alta y el central serán continuos, y los retornos, como ya se ha referido, serán por la extrema derecha.
Por lo anterior, la ciudadanía tulancinguense considera que estos nuevos retornos serán aún más riesgosos para esta vialidad, ya que se tiene la experiencia del retorno ubicado a la altura del club Britania; el cual es uno de los puntos donde se han suscitado mayores accidentes en esta arteria, debido precisamente al desconocimiento de que es un retorno de extrema derecha, por parte de quien visita el municipio o pasa por primera vez en esta vialidad.
Asimismo, consideran que esta situación será aún más complicada debido a que el carril utilizado para retorno, tendrá que ser utilizado también por el transporte público para ascenso y descenso de pasaje.