Por el derecho a existir

Las personas, de manera normalizada, generamos expresiones que discriminan, laceran y denigran la dignidad humana

El día Internacional de los Pueblos Indígenas, es la oportunidad para reflexionar y accionar en torno a los derechos alcanzados y las deudas pendientes con los pueblos originarios, es una invitación a generar agendas sólidas para las políticas públicas y el acceso efectivo a la justicia a la salud y a todas las prerrogativas en igualdad de condiciones.

Más allá del folclor gastronómico, de los tejidos, las danzas y la música es fundamental reconocer a las personas de las poblaciones originarias como sujetos plenos de derecho y esto implica un profundo análisis que atraviesa las estructuras mentales donde aún se encuentra alojado el racismo y la discriminación.

Las personas, de manera normalizada, generamos expresiones que discriminan, laceran y denigran la dignidad humana de quienes son parte de los pueblos ancestrales, incluso el auto reconocimiento es un proceso de resistencia, frente a las continuas batallas que se viven día a día, por hacer uso de su voz en su idioma materno.

Al respecto, es importante señalar la complejidad en la estructura de las lenguas maternas, son tan trascendentales como el inglés, el francés o el alemán, pero tan devaluadas, que las personas tienen que ocultar esta identidad para no ser señalados o tratados como ciudadanos de segunda.

En los últimos meses, el desarrollo de las actividades profesionales, me han llevado a compartir y convivir con personas traductoras e intérpretes de las lenguas maternas en el estado de Hidalgo, la experiencia ha sido enriquecedora en tanto me han generado cuestionamientos, sobre la dignificación de su labor, los años de especialización y la lucha constante por el reconocimiento, son mujeres y hombres que están trabajando día a día en la preservación, difusión, pero también en una labor de justicia social en los tribunales dotando de la defensa jurídica efectiva.

Las personas intérpretes y traductoras tienen un trabajo poco reconocido en plasmar una cosmovisión completa en sus líneas, en generar una abstracción del mundo a otro mundo y en palabras de la Magistrada Otalora, hacen un trabajo bisagra que conecta a dos visiones del mundo en una convivencia de derechos.

Por eso, las conmemoraciones deben ser una provocación al cambio, una reforma de mentalidades en las que confluyen el derecho a existir con dignidad y con el orgullo de tener raíces firmes sobre las cuales el respeto a la diferencia nos permita gozar de igualdad de condiciones.

El día internacional de los Pueblos Indígenas, es una fecha para revisar nuestros privilegios también, repensar nuestras formas de estructurarlos y establecer acuerdos personales y sociales en los que todos avancemos, en palabras del doctor Álvaro Pop Ac que nadie se quede atrás.