Analistas califican su discurso como “del pasado”
“Defensa de la soberanía… el único interés será el del país y de sus habitantes”
El nuevo panorama de la agenda bilateral, además del rechazo a los muros, incluye como interés de México respetar el envío de remesas de mexicanos en EU y la protección a las inversiones hacia México. Se necesita “una frontera que nos una y no que nos divida. México no cree en los muros, cree en los puentes. Nuestra frontera debe ser nuestro mejor espacio de convivencia”, insistió el presidente Peña.
Con el nuevo gobierno de EU no habrá ni confrontación ni sumisión. La solución es el diálogo y la negociación afirmó el presidente Enrique Peña Nieto e insistió en que México no cree en muros, sino en puentes para la relación entre los países. Dijo que México actuará a partir del principio de su soberanía y donde el único interés será el del país y sus habitantes. “Dialogaremos como países soberanos” y a partir de la seguridad, dignidad, firmeza y confianza en las fortalezas del país.
Admitió que es evidente que el gobierno de EU tiene una nueva visión para su política exterior y que frente a ésta México está obligado a tomar acciones para defender su interés nacional. “Es claro que tenemos que iniciar una negociación”.
Para fijar la posición de México frente al nuevo panorama internacional y particularmente la llegada de Trump a la Casa Blanca, el gobierno de la República invitó a Los Pinos a representantes del sector privado, laboral, del Poder Legislativo y gobernadores principalmente.
Además intervinieron el canciller Luis Videgaray; el líder del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón; el secretario general de la CTM, Carlos Aceves del Olmo, y el presidente del Senado, Pablo Escudero.
En su mensaje, el Presidente indicó cinco principios bajo los cuales realizará la negociación con el gobierno de Trump: soberanía nacional, respeto al Estado de derecho, visión constructiva y propositiva, integración de Norteamérica y negociación integral.
Peña dijo que ante la “evidente dificultad” del Acuerdo Transpacífico (ATP), iniciará de inmediato conversaciones sobre nuevos acuerdos comerciales bilaterales para los países que participaban en ese tratado.
México, detalló, persigue diez objetivos en este nuevo diálogo bilateral:
1. Compromiso del gobierno de EU de garantizar un trato humano y de respeto a migrantes mexicanos.
2. Que cualquier proceso de repatriación se dé de forma ordenada y coordinada entre ambos países.
3. El desarrollo del hemisferio debe ser una responsabilidad compartida. México, EU y Canadá deben asumir un compromiso concreto conjunto para el desarrollo de Centroamérica.
4. Asegurar el libre flujo de remesas evitando que se dificulte o encarezca su envío.
5. El gobierno de EU debe comprometerse trabajar corresponsablemente para detener el tráfico ilegal de armas, drogas y dinero ilícito que cobra miles de vida cada año en el país.
6. Preservar el libre comercio entre los tres y mantener libre de cualquier arancel los intercambios comerciales.
7. Incluir nuevos sectores en la modernización del TLCAN, como energía y telecomunicaciones.
8. Cualquier nuevo acuerdo comercial debe traducirse en mejores salarios para los trabajadores mexicanos.
9. Proteger el flujo de inversiones hacia México.
10. Trabajar por una frontera “que nos una, no que nos divida.
Peña insistió en que la nueva relación con EU debe ser un trabajo de todos y no solo del gobierno y las negociaciones deben acompañarse y estar respaldadas por las instituciones del estado, y la sociedad en general.
Peña dijo que cualquier repatriación sea “ordenada y coordinada”, impulsar el desarrollo centroamericano y preservar el libre comercio.
Fijó como metas ampliar la negociación comercial a otros sectores como las telecomunicaciones, la energía y el comercio electrónico; que un nuevo acuerdo implique mejores salarios para los trabajadores mexicanos y crear una frontera que una, no que divida.