Los comerciantes de artículos artesanales ubicados en el Centro Histórico de la capital hidalguense reportan buenas ventas en estos últimos días en cuanto a la adquisición de sus productos decorativos y especialmente de juguetes.

De la mercancía que más busca la gente son los clásicos juegos de mesa, los baleros y trompos, que piden los padres para sus hijos o simplemente como adorno para sus casas, que podrían ser roperitos, portarretratos o colgantes, cuyos precios van desde los 15 pesos.

Especialmente en esta temporada, han notado un incremento en sus ingresos, pues atraen la atención de turistas o los mismos locales que durante estas fiestas quieren dar un obsequio original.

Además de esto, son las guarderías y jardín de niños sus principales compradores, ya que llegan buscando el clásico pizarrón verde o los rompecabezas para los niños, “los maestros les están enseñando la importancia que tienen los juguetes de madera, porque los niños siempre piden que su celular o su computadora” comenta la señora Elizabeth.

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Comerciantes de artículos artesanales ubicados en el Centro Histórico de la capital hidalguense reportan buenas ventas.

Los productos regionales son adquiridos de la ciudad de Huauchinango, Puebla, donde la gente originaria de este lugar se dedica a su realización y donde también se ha visto un aumento en otros estados a los que distribuyen.

“Nosotros tenemos que hacer nuestro pedido con anticipación porque luego se agota y no alcanzamos a traer todo lo que quisiéramos o nos piden” agrega la señora Elizabeth quien desearía traer más producto para ofrecer pero comenta que su economía no se lo permite.

Finalmente los comerciantes invitan a la población a conservar la tradición consumiendo producto mexicano y apoyar a los artesanos y distribuidores de estos juguetes.