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COBERTURA ESPECIAL DE SEMANA SANTA

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Domingo misas de resurrección y tradicional quema de judas

Después de seis días de actividades para hacer memoria de la pasión y muerte de Jesús, el día de hoy, concluye la semana mayor con misas en diferentes parroquias referentes a la resurrección; además de la tradicional quema de Judas que se realiza principalmente en los barrios altos de la capital hidalguense.

 

Al respecto, el presbítero Luis Romero Velázquez, encargado de la iglesia del Espíritu Santo, recordó que la Semana Santa comienza desde el domingo de ramos y culmina el domingo de resurrección, y posteriormente la iglesia celebra  la octava de pascua; es decir, ocho días para contemplar la Resurrección y un Tiempo Pascual de cincuenta días para seguir festejando la Resurrección del Señor.

 

“El obispo Don Pedro, nos pidió que tratáramos  de estar en nuestras parroquias en la semana de pascua, es decir, la siguiente semana celebrando el triunfo  de Cristo sobre la muerte, y que estuviéramos toda la semana en la parroquia”, dijo el padre Luis Romero.

Quema de Judas: Triunfo del bien sobre el mal

 

Con el sábado de gloria y el domingo de resurrección, se celebra el triunfo de Jesús sobre la muerte; y en algunos puntos del estado, principalmente en los barrios altos como El Arbolito y Cubitos se realiza la tradicional quema de Judas.

 

Esta actividad refiere a colgar un muñeco con la imagen de Judas Iscariote, apóstol que traicionó a Jesús por unas monedas; aunque también acostumbran a representar el mal, con un demonio; a este se le añaden cohetes que encienden para quemar el muñeco, lo que representa terminar con la maldad.

 

Esta tradición ha presentado cambios, pues al muñeco colocan máscaras de algún personaje público o funcionario político, en esta ocasión lo personificaron como Donald Trump.

 

Es importante señalar que específicamente en el Barrio El Arbolito, a estos muñecos se les cuelgan bolsas con enseres principalmente latas de atún, frijoles, sardinas, enseñadas de verduras, chiles; y después haber sido quemado con los cuetes, los vecinos comienzan a brincar para agarrar alguna de estas bolsas.

 

En esta edición, quemaron ocho muñecos, el último de Judas Iscariote, y al terminar a los pequeños de este barrio les entregaron juguetes.