• El Guadalajara fue un desastre en todos los ámbitos: deportivo y directivo, porque la gente de pantalón largo tomó determinaciones que afectaron deportivamente
El 2018 ha sido el peor año para las Chivas en décadas y lo cerraron con “broche de oro”. Hicieron el ridículo en el Mundial de Clubes al quedar en el sexto lugar, perdiendo ante el Kashima y empatando con el Espérance Sportive de Túnez, que también los derrotó en penaltis, al tiempo que su antagonista, el América, ganaba títulos. En el equipo mayor, alcanzó la estrella 13, la femenil se coronó y la Sub-17, también. El Guadalajara fue un desastre en todos los ámbitos: deportivo y directivo, porque la gente de pantalón largo tomó determinaciones que afectaron deportivamente, a tal grado que en el Clausura 2018 no ganó un solo partido como local y, por obvias razones, se quedó fuera de la Liguilla. Sumó 15 puntos y fue penúltimo de la tabla. El Rebaño Sagrado, en este periodo, vivió incertidumbre por todos lados. La dirigencia contrató a Francisco Gabriel de Anda para hacer un trabajo delicado, “operación limpieza”, y lo logró. Echaron al técnico que, por ahora, es el segundo más ganador en la historia del club: Matías Almeyda, quien consiguió cinco títulos oficiales y puso a las Chivas en el plano internacional ganado la Concachampions, el 25 de abril. El motivo de su adiós fue que se puso del lado de los jugadores cuando pidieron públicamente que les pagaran los premios pendientes, tras el doblete obtenido en la Liga y la Copa MX. Fue lo último que logró, porque la dirigencia hizo de todo, con puñaladas traperas, para que Almeyda dejara al equipo, ya que antes había vendido a Rodolfo Pizarro, elemento vital en el funcionamiento. Entre nubarrones y protestas de la afición llegó José Saturnino Cardozo. Para el Apertura 2018 nada cambió. De local, el equipo fue una lágrima, con poca hambre de victoria y solamente alcanzó un triunfo, en la fecha seis, frente al Necaxa (1-0), el 12 de agosto. El Guadalajara no pudo dar futbolísticamente lo que se esperaba. Estaba debilitado con las bajas y varios jugadores inconformes. Fechas Letales 26 de abril. En España se hace oficial la llegada de Oswaldo Alanís a La Liga, con el Getafe. 17 de mayo. Rodolfo Cota es anunciado como nuevo guardameta del León. Las Chivas no renuevan su préstamo. 3 de junio. Se hace oficial la venta de Rodolfo Pizarro al Monterrey. 11 de junio. Matías Almeyda deja el cargo de director técnico en el club. 3 de agosto. Cambios directivos en las Chivas: José Luis Higuera se convierte en director general del equipo, mientras que Amaury Vergara es nombrado vicepresidente ejecutivo del Grupo Omnilife-Chivas. 17 de diciembre. Las Chivas anuncian en sus redes sociales la salida de Carlos Salcido. 18 de diciembre. Con el mismo mecanismo se oficializan las salidas de Orbelín Pineda, Edwin Hernández, así como el préstamo de César Huerta al Zacatepec. Antes, habían cedido a José Juan Macías al León y Ángel Sepúlveda al Necaxa. Fecha dolorosa que jamás olvidará la afición rojiblanca, ya que su Guadalajara hizo historia al igualar el peor lugar de un equipo mexicano en el Mundial de Clubes: sexto. Le había pasado al Pachuca, en la edición 2007. Opinan los expertos PACO VILLA El balance es muy negativo por tres razones: 1.— No clasificó a ninguna de las Liguillas. 2.— Se ubicó en el peor lugar histórico de un equipo mexicano en el Mundial de Clubes. 3.— La afición chiva le ha puesto la espalda a la directiva por haber dado mayor atención a una película que apoyó a la continuidad de un equipo competitivo. Y el América los superó en títulos. CARLOS GUERRERO Chivas fue un rotundo fracaso y una pérdida de rumbo. No hay identidad; hoy es un equipo más y no genera pasión. Está lejos de ser formativo y que intente tener a los mejores mexicanos en sus filas. Hoy no se comporta como un grande, no juega como tal y por eso no tiene los resultados que la historia le exige. No hay una cabeza que tome buenas decisiones. CIRO PROCUNA El fracaso no me extraña. Desde que ganaron la Concacaf, se debilitaron, en lugar de fortalecerse. No tienen un proyecto deportivo sólido. Todos tienen una parte de la culpa. Desde los jugadores, José Cardozo y la directiva, encabezada por José Luis Higuera. A él le encargaron el proyecto deportivo. Deben dejar de deshacerse de sus mejores hombres y contratar buenos refuerzos.
