- Los inversores se refugian en valores seguros y hacen caer a las monedas de Latinoamércia a mínimos de hace más de 10 años
El real brasileño ha cedido más de 30% frente al dólar en 2015, el peso mexicano más de 20%, el peso argentino, 10% y el colombiano, más del 30%. La percepción de una mayor debilidad de la economía china afecta en especial a Latinoamérica. Países como Perú, Brasil o Colombia han basado gran parte de su crecimiento en la exportación de materias primas al país asiático.
El grueso de las monedas latinoamericanas volvió a sufrir severos empujones en el baile cambiario durante el principio de esta semana, profundizando una tendencia a la baja que dura ya varios meses. El dólar, moneda de referencia, no sólo aguanta el temporal sino que cada vez está más fortalecido. El peso mexicano, el colombiano o el real brasileño rondan registros mínimos de hace más de una década frente al dólar. Al desplome del precio de las materias primas y la esperada subida de tipos de interés en EU se han sumado ahora las turbulencias financieras en China. Ante el nerviosismo en los parqués y el repunte de la volatilidad, los inversores optan por refugiarse en puertos seguros –dólar, euro, deuda europea- acentuando más la debilidad de las divisas latinoamericanas.
Todas las bolsas mundiales cayeron con fuerza durante la jornada del lunes, arrastradas por las dudas que suscita la economía china. El frenazo de la segunda economía del mundo parece que será más profundo del esperado y la amenaza de un triple pinchazo chino –crediticio, inmobiliario y bursátil– está provocando ajustes en las placas tectónicas del mundo financiero. “China aún se encuentra lejos de una recesión, pero los mercados de capitales asiáticos ya comenzaron a reaccionar negativamente a las menores expectativas de crecimiento.