Tulancingo
• La ex dirigente, Sandra Bones Ortega, aseguró que deja una cámara bien constituida y sólida
La noche del pasado lunes, se llevó a cabo la asamblea de cambio de dirigencia y mesa directiva de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos (Canaco Servitur) delegación Tulancingo. Fue el arquitecto Alejandro de la Concha Ortiz quien tomó las riendas para el siguiente periodo.
Lo anterior representó el fin de los tres años de gestión de la ingeniera Sandra Bones Ortega, quien reconoció que el dirigir la Canaco fue un gran reto en su vida, y al paso de tres años, asegura que deja un organismo sólido.
“Puedo decirle al público en general y al comercio establecido, que dejo a la Cámara fortalecida y trabajando, con proyectos, programa de apoyo, y además, legal y jurídicamente se tiene toda la documentación en regla”, aseguró Bones Ortega.
La dirigente saliente, subrayó que durante su gestión se recuperó la representación de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) y el respaldo de la Secretaría de Economía.
Recalcó que recibió un organismo sin ninguna afiliación firme y ahora se cuenta con una cantidad superior a los 400 afiliados.
“Cuando tomé la presidencia de la Canaco me entregaron 100 afiliaciones, pero al momento de checarlas, nos dimos cuenta que no se les había dado ningún servicio ni seguimiento, y el comerciante ya no tenía la confianza de seguir en la cámara”, lamentó
Aseguró que actualmente se ha recuperado la confianza del comerciante y eso se vio reflejado en el número de afiliados.
Resaltó que al inicio de sus tres años de gestión, se fortaleció a sus afiliados otorgando 300 tabletas electrónicas con punto de venta, posteriormente se gestionaron dos computadoras, también con punto de venta, y en el tercer año se buscó un apoyo de 4 mil pesos a fondo perdido, lamentablemente de los 90 aspirantes, sólo se concretaron 20.
Por su parte, el nuevo presidente, Alejando de la Concha Ortiz, dijo que se conducirán con perseverancia, ética, responsabilidad social para elevar la calidad de vida de los entornos y de la sociedad.
Prometió, además, descuentos en trámites gubernamentales, capacitaciones, promociones y programas de apoyo; así como poner especial atención en la seguridad de los comerciantes, tras reconocer que se suscitan de dos a tres asaltos por semana.
