Home Destacadas Amor por su trabajo, orgullo, insultos de la gente… frustración

Amor por su trabajo, orgullo, insultos de la gente… frustración

  • Diario Plaza Juárez entrevista a mujeres policías
  • El 95% de mujeres policías son jefas de familia tienen que realizar un doble y hasta triple papel

“Portar el uniformes de policía es un orgullo. Además, nos gusta nuestro trabajo y lo hacemos con dedicación, honestidad y pasión, sin embargo cada vez es más difícil y complicado realizarlo, por la falta de valores y respeto de algunas personas”, acusaron mujeres policías quienes forman parte de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Tula.

En entrevistas para Diario Plaza Juárez, Esmeralda Martínez, Gabriela Ramírez,  María de Jesús García y Sandra  Montiel coincidieron en que debido a que el 95% de mujeres policías son jefas de familia tienen que realizar un doble y hasta triple papel, ya que tienen que estar al pendiente de sus hijos y en ocasiones deben realizar alguna otra actividad para ganarse de manera honesta un dinero extra y así les alcance el ingreso para sostener a su familia.

Dijeron que todavía es más complicado realizar su trabajo durante la pandemia de Covid-19, al ser la autoridad más próxima a la población y que por eso tratan de cuidarse al máximo, portando cubre bocas, guantes, careta y gel.

Su labor es concientizar a la población para que se cuiden y cuiden a su familia cumpliendo con las medidas sanitarias. 

TIENEN QUE PEDIRLE A SUS HIJOS NO ABRAZARLAS 

“Al llegar  casa luego de la jornada laboral es todo un show quisiéramos abrazar a nuestros hijos, pero no podemos. Tenemos que desinfectarnos, lavar de inmediato la ropa y bañarnos y aun después de todo un protocolo con temor nos acercamos a la familia”.

Señalaron que lamentablemente por pedirle a la gente que cumpla con las medidas reciben insultos, algunos que no hacen conciencia de que lo más importante es el cuidado de la salud, las insultan e incluso en ocasiones hasta las sobajan o discriminan. 

La corporación policiaca está conformada por poco más de 200 elementos de los cuales el 25 por ciento son mujeres. Varias de ellas cuentan con licenciatura e incluso maestría entre ellas Sandra.

“EL DE 19 EN LA UNI, EL DE 13 EN SECU, EL DE 1 EN LA CUNA” 

María de Jesús nos compartió que en su caso es jefa de familia y que todos los días sale a la calle a realizar su trabajo con amor y pasión, sabedora de que debe llevar el sustento para sus tres hijos: el de 19 años cursa la universidad, el de 13 años acude a la secundaria y un bebe de un año de vida, casi siempre en su cuna.

Esmeralda platicó que ser policía es una labor hermosa y que para portar el uniforme se debe tener vocación y que es algo que se trae en la sangre, al tiempo que  reconoció que es difícil  y complicado, ya que en el caso es jefa de familia y tienen que cumplir con los dos roles, “En casa tengo tres hijos que educar e inculcarle esos valores que en mucha gente se han perdió, y al cumplir con ese trabajo en la familia me siento plena”.

Señaló que el policía, ya sea hombre o mujer siempre va ser criticado, aún y cuando necesite la gente de ellos, pero que eso no les importa, debido a que la profesión que ellos desempeñan es bonita y les deja grandes satisfacciones por darle un servicio a la ciudadanía.

“AÚN NO NOS HAN DADO OPORTUNIDAD DE SER MANDOS”

Compartieron que en la corporación Tula todavía no se les da la oportunidad de formar parte de los mandos policiacos y que sólo han sido en algún momento encargadas de grupo, por lo que consideran que falta mucho por que se dé una equidad de género y que para eso seguirán realizando su trabajo de la mejor manera para que se les justicia, no obstante a que han contado con el apoyo del secretario de Seguridad Fermín Hernández Martínez.

Gabriela narra que le gusta lo que hace y sabe la disciplina que llevar a cabo o debe aplicar, pero que al llegar a casa es diferente, debido a que esa misma seriedad y firmeza con que realiza su trabajo no la puede aplicar con sus dos hijos, no obstante a que es estricta con ellas. Refirió que como al ser mujeres policías siguen sufriendo discriminación cuando les dicen “de mis impuestos tragas o cuando un hombre no le permite que una mujer ejerce una función de autoridad y vienen  los insultos”, pero que eso no las limita sino que por el contrario le echan más ganas a realizar de la mejor manera su trabajo.

Sandra comentó que lo que más le apasiona es la parte de la prevención y que desde su responsabilidad le es grato trabajar con la ciudadanía, sin importar que el policía se tienen que enfrentar a la parte fea de la sociedad, “Pero eso es el pan de cada día al que se enfrentan”.

Finalmente nuestras entrevistadas señalaron que todos los días seguirán esforzándose para cumplir con su misión ante la sociedad que es brindar seguridad y que desde luego a través de su trabajo que es bondadoso les permita ofrecer a su familia un mejor bienestar.