(6 días para que tengamos nuevo Gobernador con OMAR FAYAD MENESES y empiece una nueva historia. Se espera que el nuevo mandatario reciba la casa en orden para poder gobernar con buena base. Y en esto cuentan mucho las cuentas que entreguen los responsables de cada área. Ya veremos cómo caminan las cosas, porque una cosa es cierta, quien entra viene decidido a no dejar pasar acciones de vivos o de vividores que hayan usado los cargos o puestos para hacerse de dinero fácil. Si así lo hicieron, más vale que se preparen, porque OMAR le conoce a la administración y encuentra con mucha facilidad a los ratones.)
A LA CAZA DE RATONES
En 6 días OMAR FAYAD tomará posesión como nuevo gobernador del estado,con apuestas en su gabinete que al parecer van a sorprender por la oportunidad que le dará a gente nueva y por la forma como dejará fuera a quienes por años han sido dueños de esos cargos y que por esta vez no serán llamados a ser los dueños de estas parcelas.
Esto desde luego es bueno, porque gente nueva refresca la administración, porque gente con ganas, sin mañas, con deseos y con capacidad le sirven a Hidalgo y seguramente le ayudarán.
Los que se quedarán sin los huesos de siempre ¿se van a enojar? Desde luego, porque nadie pierde el paraíso así como así, pero en esta medida OMAR ya anunció QUE ES EL GOBERNADOR y que para ello a nadie le debe pedir permiso, porque quien le dio esta calidad FUE EL VOTO CIUDADANO y para eso lo pusieron, para ejercer el poder en beneficio de la mayoría, no de grupitos de poder que para maldita la cosa sirvieron en la elección pasada donde lo único que hicieron fue estorbar y esperar el resultado que pensaron era ganar, para después pasar con su charola a cobrar lo que no trabajaron.
Pero ahora resulta que OMAR se dio cuenta de que estos grupos de poder no hicieron nada y que PERDIERON TODO, que dejaron que el PRI se hundiera, y más aún que en muchos casos trabajaron contra su partido y en contra de su presidente ALBERTO MELÉNDEZ al que quisieron acabar y ahora es tiempo de pagar.
Es decir, se les acabó el hueso.
Y ni por dónde pelear algo a lo que no tienen derecho. Es la hora del cambio… de nuevos tiempos. De nuevos aires…. Aunque a los de siempre no les guste.
Más aún en este cambio el nuevo gobernador parece decidido a poner las cosas en su lugar y a quienes hayan metido las manos y las uñas de manera ruin les va a ir mal porque habrá caza DE RATONES.
Y parece que la caza va en serio.
Así que quien se haya pasado de vivo no le va a ir bien, porque OMAR le conoce a la administración pública y detecta con buen ojo dónde hay ratones y los caza.
Y va en serio.
¿QUIÉN NO SABE UNA CANCIÓN DE JUAN GABRIEL?
Ahora que se murió JUAN GABRIEL se da uno cuenta de que todo mundo, incluidos nosotros desde luego, conocemos, sabemos y cantamos las canciones del conocido como “El divo de Juárez”, que supo crecer desde la soledad más absoluta a la grande más encumbrada hasta convertirse en líder de la música no sólo mexicana sino latina y de muchas latitudes, porque era un hombre con talento y con indudable capacidad para componer y para hacer llegar a sus letras y a su música el alma de la gente.
Nos tocó la partida de uno de los artistas más grandes de México, sólo comparable por su grandeza a PEDRO INFANTE y JORGE NEGRETE, que a lo mejor no alcanzamos a medir, pero que sólo el tiempo ubicará en su justo sitio, pero que ya desde ahora se coloca por su fuerza en lo que representa para todos.
Sus canciones, que finalmente es lo que aporta a la sociedad, son del gusto de la gente que las canta y las siente como suyas.
Y aquí sí que nadie diga que no las conoce porque de una o de otra forma las ha cantado y sabe de qué se trata. “Querida”, “Amor Eterno”, “La Diferencia”, “No me vuelvo a Enamorar”, sólo por citar algunas, nos gritan a las orejas de la presencia de JUAN GABRIEL que parece que se fue, pero permanecerá siempre en las familias y en las fiestas en que se seguirán cantando sus canciones como se siguen cantando las de JOSÉ ALFREDO JIMÉNEZ, por mucho internet o Twitter que haya, porque siguen siendo los reyes de México.
