(En 43 días registro de candidato a Gobernador)
POR SOBRE LA OBRA MATERIAL, LO MÁS IMPORTANTE
QUE DEJA OLVERA ES UN HIDALGO EN PAZ
El gobernador Olvera, con toda seguridad, vive las urgencias de los últimos meses del ejercicio del poder en que se busca hacer de la responsabilidad de gobernador, que sólo unos cuantos hidalguenses tienen el privilegio de serlo, una oportunidad de hacer permanente y seria historia, de ser recordado por lo que hizo al estar al frente de los destinos de nuestra tierra, de tener el timón del barco en sus manos y de no pasar en el libro de la historia del estado como una raya en el agua que no se le recuerde por nada. Esa debe ser la preocupación fuerte de quienes gobiernan, el reto ante la historia, porque la vida, la política, las circunstancias le pusieron en el camino de hacer de su vida una aportación fuerte para que esta tierra nuestra progresara y avanzara en su destino de ser estado fuerte, por sus oportunidades de ubicación, de geografía, de naturaleza y sobre todo de gente noble y trabajadora que le apuesta al esfuerzo para salir adelante bajo la guía de gobernantes sabios y responsables.
El caso es que los días en que se pudo poner en práctica el proyecto en bien del estado, para hacer esta historia, se acaba ya y en menos de siete meses se dejara el cargo, para que otra persona se encargue del cargo de gobernador, porque así lo dicta la ley y en esto no hay vuelta de hoja, de tal manera que lo que se haya caminado será el logro que escriba la historia del gobernador saliente y lo que le dé presencia ante los ojos fuertes y serios de los jueces del pueblo.
La ciudadanía es fuerte para juzgar. No da calificativos gratis. Y generalmente no pasa de una palabra, máximo dos.
“Trabajador”, “hizo puentes”, “inteligente”, “no hizo nada” y así por el estilo, sin ponerse a analizar el gobierno del que se fue con argumentaciones que analicen las obras o lo que se hizo.
Es como una fama que se gana por el estilo mismo de gobernar y que se afirma en el tiempo en que se ejerce el poder.
MUCHAS OBRAS… PERO NO ES LO MÁS IMPORTANTE
Olvera es un gobernador de muchas obras, sin duda alguna. Las universidades tecnológicas como las de Tulancingo y Cuautepec, la de la energía, el apoyo con miles de computadoras, y sin duda LA CIUDAD DEL CONOCIMIENTO Y LA CULTURA con el Centro Nacional de Innovación Textil y del Vestido, el TUZOBÚS que podría ser un referente de su gobierno, sin dejar de ver el desarrollo urbano de PLATAH que nos convierte en el nuevo destino industrial del centro de México.
SIN EMBARGO…
Y pese a lo importante que es la obra material, los ciudadanos la ven como parte del compromiso que tiene como gobernador y salvo el Tuzobús, que todavía está en el debate entre algunos, las demás se ven con buen ojo pero hasta ahí, pese a lo importante que son para el desarrollo del estado.
Y ENTONCES ¿QUÉ ES LO IMPORTANTE?
Después de lo que pasó en el penal de Topo Chico en Monterrey en el estado de Nuevo León, donde hubo 49 internos muertos, se debe aceptar que el gran logro de Olvera, es que entrega un estado de Hidalgo en paz y en tranquilidad, con calificaciones tan buenas que son de excelencia, pues apenas hace unos meses fue declarado como EL ESTADO MÁS PACÍFICO DE MÉXICO por el índice de Paz en México, en un estudio elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz, IEP, con sede en Sidney, Australia y con oficinas de representación en México y Nueva York .Para darle esta calificación se analizaron los temas de homicidios, crímenes violentos, con armas, encarcelamientos, financiación de la policía, crimen organizado, y eficiencia de la justicia, lo que le dio a Hidalgo una calificación de 1.604, que lo hace el de mejor índice en México, seguido de Yucatán.
El gobernador Olvera señaló en algún momento, que este es un logro que se debe atribuir al buen trabajo de varios gobernadores que han aportado buena labor en la policía y en la relación con otros estados, y sin duda a su buena mano para mantener buenos canales de diálogo y de colaboración con los estados vecinos y con la federación, situación contraria a la del gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón “el Bronco”, que se negó al Convenio de Coordinación con la Secretaría de Gobernación y por desgracia, así le fue.
Aquí todo al revés, pues la coordinación con Osorio fue de primera.
Entregar un estado en paz y tranquilo, debe ser considerado, por lo menos así lo pensamos, como el gran logro de Olvera, sin dejar de ver la obra material, que vaya que si es importante.
