QUEDAN 10 DÍAS Y VIENE LO BUENO

Sólo quedan 10 días de precampaña en que los dos aspirantes  que de verdad pesan: Julio Menchaca de Morena y Carolina Viggiano de “Va por Hidalgo”, terminarán este primer round, muy suavecito todavía, y limitado por la misma ley que les prohíbe casi todo, porque no es campaña donde todos los que puedan y quieran acudir están invitados y donde se puede plantear todo, fundamentalmente sus propuestas.

Sin embargo y aunque la precampaña es apenas para calentar motores y para un poco de ejercicio para el partido ya en serio, se pudieron ver los estilos de hacer política de uno y de otra, por la forma en que se manifestaron y plantearon sus posicionamiento sobre aspectos de la vida del estado y el plano nacional.

Julio mantiene como postura su adhesión total a la Cuarta Transformación en Hidalgo, con todo lo que significa ejercer la responsabilidad de gobernador, si el voto lo hace titular del Poder Ejecutivo, con todas sus consecuencias en las áreas de poder y de gobierno.

Quedó claro que a Menchaca no le apuesta a la confrontación o a la pelea ruda, de denuncias y palabras fuertes, sino al diálogo y al acuerdo.

Es su estilo de hacer política y de relacionarse con los ciudadanos y desde luego para muchos es una oferta atractiva.

Carolina Viggiano es de otro estilo, tan válido como el de Julio, pero con un lenguaje distinto de denuncia y de exigencia al gobierno federal para que cumpla sus compromisos con nuestra entidad  y tiene también mucha gente que ve bien esté formado de buscar el voto.

Pero a partir del 3 de abril y hasta el 1 de junio, vienen las campañas. En forma, en donde cambia el escenario y se abre el campo para las propuestas, denuncias y exigencias, y también para los debates entre los que para entonces ya serán candidatos.

Serán 60 días en que se construirá un nuevo  gobernador, ya sea Julio o Carolina.

Mientras esto sucede, ni duda cabe que bastaron estos días de precampaña para tener una idea de cómo son los aspirantes, y todos tenemos ya una idea de cómo son y qué nos pueden ofrecer.

Todo hace suponer que los días que faltan serán muy movidos, pero no tanto como los que  seguirán ya en las campañas.

Después del 10 de febrero tendrán casi 50 días para afinar sus campañas.

Días de relativa calma y de planeación para la batalla.

Lo mejor está por llegar.