¿Y EN EL PRI CUÁNDO?
Morena ya dio el primer golpe en la carrera por la gubernatura con la decisión de llevar como candidato casi seguramente a Julio Menchaca Salazar (JMS) pese a todo lo que se dijo y habló de la división y enfrentamiento entre personajes y grupos, que buscaron con todo descarrilar el tren de Menchaca, que finalmente se impuso en las encuestas a todos los competidores, lo que refleja que es voluntad de la mayoría de este partido que él sea el abanderado para la elección del 5 de junio y con muchas posibilidades de ser gobernador.
La primera jugada de buen ajedrez político de los morenos fue dejar fuera a Francisco Xavier, que después de verse desalojado de la carrera, mostró su verdadero rostro de “convenenciero” y “acomodaticio” ,atacando a todos de los que sospechaba que lo habían dejado sin posibilidades, cuando según él, nadie ni siquiera se le acercaba, según sus propias encuestas.
Ahora va como independiente, y se sabe que lo impulsan muchos hilos de todos los colores, que ya se sentían con la gubernatura antes del “Pacazo”.
MIENTRAS TANTO EN EL PRI
Parece que no caminan bien las cosas, por la forma en que la vieja clase política arropa a una de las propuestas para la candidatura, con signos de enfrentamiento contra el cuarto piso de Palacio de gobierno y de actitudes de revancha en caso de ganar. En los hechos, lo que se ve es que hay división en el tricolor y que un ejército tiene la bandera del PRI NACIONAL y presencia de algunos (que fueron figuras estatales hace algunos ayeres) y el otro, el del PRI ESTATAL, que en su bandera está la efigie del gobernador Fayad, figura nacional por un buen gobierno en dichos y acciones.
Les urge afianzar la unidad, pero hará falta mucha generosidad y virtudes políticas que no son extrañas en el PRI, porque históricamente les han significado muchas victorias.
Lo que se avecina es una verdadera batalla electoral entre morenos y priístas junto con sus aliados, en la que el voto ciudadano decidirá.
Y el reloj apremia para las grandes decisiones.
