
¿QUÉ DIABLOS ES EL PODER, QUE HACEN TODO POR TENERLO?
El poder político tiene algo que enloquece muchas veces a los que lo tienen y provoca hechos que parece irracionales, y en ocasiones muy cercanos a lo indebido en la hora de pelearlo, ya sea en lo que se supone es la voluntad del ciudadano cuando hay elecciones, pero con todos sus antecedentes en las horas de las candidaturas que casi siempre obedecen a matemáticas grillas, en que lo que cuenta es ganar el poder y en que la regla de oro es que el fin justifica los medios.
El poder tiene muchas definiciones, pero en lo elemental es la facultad de mandar para que los demás obedezcan, y en la práctica es la conducción de una comunidad de acuerdo a un proyecto que se aplica y para lo cual se utilizan todos los medios que se tengan a la mano.
En los países democráticos como el nuestro ,la legitimidad la da el ciudadano con su voto, de conformidad con un marco legal.
Y es el proceso de elección el que muchas veces crea un escenario de abusos y de ambiciones.
Se supone que en razón de un marco legal llegan a las candidaturas propuestas de mujeres y hombres dignos y con las suficientes virtudes cívicas como para aspirar a que la voluntad ciudadana los elija.
Pero sucede que es en el tramo de las candidaturas donde se dan hechos lamentables, como imposiciones en los partidos políticos, con personajes que no representan honestidad de conducta pero sí posibilidades de triunfo para los partidos, o cualidades para hacer presente una política que les deje beneficios.
Y así vemos cómo están presentes MAROMEROS que un día juegan con un partido y al otro día con otro ,sin que valgan principios ni lealtades, pues lo que importa es el poder como camino de beneficios, y por desgracia en la elección que tendremos el 6 de junio en Hidalgo hay varios de esta especie. También hay CIRQUEROS y CHAPULINES que brincan de partido en partido según convenga y de esta subespecie abundan, lo mismo que los CAZA CANDIDATURAS que son capaces de todo con tal de estar en las boletas y mejor si son pluris, pues es como sacarse la lotería sin comprar boleto.
Todo envuelto en el concepto ABUSOS porque quien se agandalla una candidatura de esta manera ni crea usted que va a ejercer su responsabilidad con honestidad.
El poder enloquece desde antes de tenerlo en los casos que hemos visto pues con tal de lograrlo recurren a todo y no importan derechos de otros o leyes, como en el caso de candidatos dizque discapacitados que todos sabemos que no lo son, pero que ya lograron sus propósitos con maña y trampa.
Y después todo lo visto, de candidatos que le apuestan no al trabajo de campaña sino al arrastre de AMLO para volver a ganar como en el 2018 y para ejercer el poder con hechos de vergüenza, como lo hicieron los diputados federales y locales de Morena, que enloquecieron con el poder para hacer barbaridades y con cero compromiso con Hidalgo.
Una cosa es la locura en la lucha por el poder y otra la más peligrosa cuando ya se logró y se ejerce con actitudes peligrosas ,por el golpeteo continuo a las instituciones y al marco legal, que pone en riesgo a todo el país.
El poder enloquece sobre todo si no se tiene al lado alguien que le diga al rey que va desnudo.
Ahora que no hay que olvidar que el poder en México es el paso previo al buen billete.
Tiempos de locura….puede ser, pero más parece un juego de vivos.
Nada nuevo.