LOS CHARREZ Y GRUPO UNIVERSIDAD AL BORDE DEL ABISMO Y DEL FINAL 

Dicen los que tienen experiencia que todo pasa y que nada es para siempre, en lo que es la presencia de personajes y apellidos poderosos ante los cuales  la gente se inclinaba y les rendía pleitesía, porque eran los dadores de beneficios que en alguna época empezaban por la vida misma.

Eran los señores del poder. Los depositarios de la autoridad para decidir los destinos de los pueblos y desde luego de la gente. 

En Hidalgo se ha dado este fenómeno. Hay nombres y apellidos que la historia nos recuerda como los grupos y hombres fuertes, que marcaron el rumbo de Hidalgo en su oportunidad y en su momento, y después confirmando lo dicho de que hada es para siempre, y que el tiempo todo lo derrumba, se ha visto cómo esas gentes poderosas pasan y se pierden en las sombras de los años.

Incluso el PRI, que fue el todopoderoso no sólo de Hidalgo  sino de México entero, ha visto como disminuye su poder, sobre todo en el 2018 cuando Morena y Obrador demostraron que no eran para siempre, aunque ahora por las  burradas de Morena, apunta nuevamente a ser partido fuerte y ganador.

Todo esto viene a cuento, porque hay dos casos  de grupos poderosos en nuestro estado, que no quisieron ver que todo pasa y más en el poder y ahora ven cómo se desvanecen, porque es casi una regia de la  vida que se cumpla un ciclo y se apague la vela del poder.

Estos dos grupos son LOS CHARREZ Y EL GRUPO UNIVERSIDAD.

Los Charrez que han sabido hacer de la gestión de apoyos para algunos municipios y comunidades del Valle del Mezquital un camino también hacia el poder, que los llevó a buscar gobernar Ixmiquilpan durante tres periodos seguidos, más de diez años como la autoridad de este municipio.

Su desmoronamiento inicia con Cipriano, uno de los tres hermanos que jugó bien sus cartas hasta llegar a ser diputado federal con la camiseta, desde luego, de Morena. Lo perdió su soberbia y por lo que se ve no medir las consecuencias que al final tuvo su irresponsabilidad de dejar morir a un joven quemado en un coche que todo indica él había accidentado. Desde luego fue el primero de los tres hermanos que fue alcalde de Ixmiquilpan,

Le heredó el cargo a su hermano Pascual que después de una desastrosa administración pretende heredar a su hermanito VICENTE, que de acuerdo al Tribunal Electoral recibió todo el apoyo del alcalde con dinero público.

El resultado es que se anuló la elección y todo indica que se puede ir a elección extraordinaria.

Signos de que este grupo de poder se desmorona.

El otro grupo es el de la Universidad, que dirige Gerardo Sosa y del que no tengo información sobre una audiencia que se llevaría a cabo hoy y que podría decidir su suerte. Pero sea lo que sea que se decida, es obvio que su grupo apuntaba al ocaso.

Si lo dejan en libertad no será lo mismo, porque lo estarán checando con lupa en el uso del dinero y si no se la dan, peor todavía.

Y no hay nada de raro, porque nada es para siempre y finalmente todo pasa.

Si cayeron imperios como el Romano, el Egipcio, el Persa, el Mongol, el Griego, el Azteca y muchísimos más, no se ve por qué no deben caer los imperios de casa como el de los Charrez  y el del Grupo Universidad.

Y hay signos de que el final está cerca, con todo lo que significa para los beneficiados de este imperio de más de treinta años en la UAEH.