A DECIDIR: ¿BAÑOS O VARGAS?; ¿JORGE O DAMIÁN?… ¿PRI O…?

Empezamos tres días previos a la elección, en que la idea es pensar, meditar, evaluar a los candidatos, para que el 18 se de un voto razonado como dicen los que saben de este asunto.

Y tienen razón, porque si no se fundamenta con buenas razones el voto, luego se tienen autoridades que para puras vergüenzas. 

Son las horas en que con responsabilidad, se debe pesar y medir en el caso de Pachuca por quién votar, si por Pablo Vargas de Morena o Sergio Baños del PRI , que todo indica van en la delantera. Los ciudadanos pondrán, suponemos, en la mesa de la reflexión sus propuestas, su historia en la vida del municipio y lo que representan como gobierno cuando lo ejercen.

En Tulancingo, los votantes deberán decidir sobre todo entre Jorge Márquez y Damián Sosa, del PRI y de Morena respectivamente, o más bien del Grupo  Universidad; y poner en la balanza lo que significa cada uno de los candidatos, como personas y políticos y su origen político, porque no es lo mismo un grupo que un partido.

En Tula, los ciudadanos con toda seguridad medirán a los candidatos como Alejandro Álvarez del PRI, Octavio Magaña del Verde, y Baptista de Morena, que parecía fuerte, y según observadores, se ha desinflado como su grupo que se hunde con el caso del Jefe Sosa. 

Y así en todos los municipios.

El voto es signo de autoridad, porque los ciudadanos le dan o le deben dar el poder a quien garantice garantía de eficacia y honestidad, y desde esta perspectiva siempre valedera es el pueblo el Jefe, y que luego le ruega al hombre de poder que por favor le atienda.

Los signos dicen que es el PRI el que tiene mejores oportunidades de mantener los 23 municipios en que gobernaba y casi seguro que crezcan los 23 municipios.

Por el contrario, Morena no parece tener buen horizonte, por todo el desorden que trae, agravado por la caída, por lo menos en tiempo electoral del Grupo Universidad, que vive una hora negra.

Son tres días importantes, para ir a la urna con una decisión bien pensada.

Porque los tiempos que vienen por la pandemia, obligan llevar a las presidencias municipales a los mejores.

No hay de otra.

Piénsele, porque su voto es poder y usted es el que manda.

El voto premia y castiga, o debe hacerlo, es una expresión de condena y de reconocimiento, hágalo valer este 18 de octubre.

Usted sabe quién es garantía de buen gobierno y quién no.

Decida bien.