ES LA HORA
• Algo parece no caminar bien en los partidos, porque se da el caso de que las candidaturas no son para la gente del grupo político en turno
Se ve, se nota la impaciencia de los que quieren ser candidatos para la elección del 7 de junio del 2020 y así ser alcaldes a partir del mes de septiembre, porque se las ingenian para estar en los ojos públicos a través de acciones que les permiten hacerse visibles y ganar un lugar en los medios de comunicación, en una manera tradicional de levantar la mano para gritar que están presentes y que tienen los merecimientos para encabezar la vida de alguno de los 84 municipios del estado.
Se supone que en nuestro sistema de partidos, son éstos los que le dan la oportunidad a las mejores apuestas para ganar y servir bien a la gente.
A esta fuente de candidaturas se debe sumar ahora la posibilidad de los independientes.
Sin embargo algo parece no caminar bien en los partidos, porque se da el caso de que las candidaturas no son para la gente del partido en cuestión, sino para una nueva clase de políticos conocidos como “chapulines”, que brincan de un partido a otro, dependiendo de lo que les convenga, donde no sólo los reciben con los brazos abiertos como debe ser en la civilidad democrática, sino que llegan para apoderarse de los partidos por encima de los miembros activos de estos.
Esto sería en el mejor de los casos porque, por lo menos en Hidalgo, se apareció una nueva plaga de “Los gandallas”, que se disfrazaron de morenos y se apoderaron de casi todas las candidaturas para la gran elección de julio pasado y vía este logro se apoderaron del Congreso para todos sus abusos, en absurda competencia e intromisión con el poder Ejecutivo, que les ha hecho fracasar, porque el Gobernador Fayad ejerce a plenitud y con éxito indudable el poder y no se presta a las marrullerías del Grupo Universidad, por más presiones y chantajes que le hagan.
Por cierto, ahora centran todo su esfuerzo para cuestionar a la administración estatal en el tema de la seguridad, sin que resulte extraño que fabriquen sus propias víctimas para presionar en esta batalla, que moralmente y en la opinión popular, la tienen perdida.
Pero hablábamos de los suspirantes por candidaturas. Recurren a todo con tal de tener la luz de la atención popular principalmente de dónde quieren ser alcaldes.
Organizan comidas si es su santo para reunir a posibles simpatizantes, como recién lo hizo don Edmundo Ramírez, que parece tener las simpatías del PRD y PAN, una coalición que seguramente se dará entre estos partidos para buscar ganar Ixmiquilpan, donde no han dejado buena memoria. Por cierto en este municipio es donde el PRI puede sufrir la revancha de quienes fueron figuras tricolores y ya no lo son.
Hay otros aspirantes más modernos, que se disfrazan de astronautas, como Canek Vázquez que busca ser candidato de Morena, con el apoyo del Grupo Universidad, pero los que conocen de esto, dicen que no tiene muchas posibilidades de ser el candidato de Morena porque en este partido no es bien visto.
Y del periodo antidiluviano dicen que hace su lucha también por Pachuca, el “hunter”, el cazador Francisco Javier, que es grillo de temporada y va a las candidaturas donde hay buena billetiza.
Ahí no tiene la culpa el indio, sino quien lo hace compadre.
Y este show grillo se da en los 84 municipios, con distintos actores, pero el mismo libreto porque es la hora de hacerse presentes, porque para muchos es su última oportunidad, sin que puedan ya por edad o por decisiones equivocadas tener otra y por ello es ahora o nunca. Si ya el ambiente se siente muy movido, es cuestión de días para que esto crezca con la aparición de personajes que gritarán tener el remedio de todos los males y a la hora buena resulten una vergüenza.
Usted nada más véalos y mídalos para que a la hora de elegir, lo haga correctamente.
Mientras tanto, están más divertidos que los programas de la televisión.
