ALFIL NEGRO

LOS CAMINOS…
A veces pienso que
Nuestra vida es sólo
Caminar sin descanso,
Avanzar pese a todo,
Y llegar a la meta

Con los pies lastimados,
Los ojos encendidos
De bosques y lagunas,
De pájaros cantando
Y pozos llenos de agua.
La vida es un camino
Que vamos caminando,
Desde el sol del inicio
De las lunas friolentas,
Con el frío de los bosques,
Del pedazo de cielo
Que se nos dio en herencia,
De las noches gloriosas
De estrellas y cometas
Junto a manos amigas,
Y ojos generosos
Que nos ayudan siempre
A cargar nuestras cruces.
Me gustan los caminos.
Los que viví de niño
Con sabinos y ahorcados,
Con piedras milagrosas
Con huellas misteriosas,
Los caminos del campo
Llenos de flores rojas,
Y mares de maizales.
Los caminos de joven
Con canciones de entonces,
Con poemas de Lorca,
Novelas de Salgaria,
con poemas de Jaime
El Sabines de Chiapas.
El que me llevaba siempre
A los ojos milagro
De la mujer que amo.
Y luego el caminito
De llegar a la cuna
De mis niños durmiendo,
Y estallar en cantos
De un gracias luminoso
Por ver en sus caritas,
La gloria que tuvieron
Los pastores nocturnos
Del Belén del milagro.
Y cantar muy bajito,
Con sonajas de perlas:
“A la rorro niño
A la rorro ya
Duérmete mi niño…”.
Y llorar de alegría
Porque tantos caminos
Tantos pasos andados
Bien valieron la pena
Al ver que se dormían
Sonrientes y apasibles…
Estrella de la cuna
del niño en casa ya.
El paso ahora es lento
Pero lleno de frutos
Los han sido  de risas,
De llantos y alegrías,
De luces y de sombras,
Pero todos hermosos.
Al final es la vida
Que el creador ha formado
Un camino en decreto
Uno por cada uno
Y a final de los pasos
Sus brazos extendidos
Para decirnos siempre:
“camino bien andado”
El juego ha terminado.

 
 

Related posts