CERRAR LA PUERTA A LA VIOLENCIA,
AHORA QUE HAY TIEMPO
Los hechos de violencia sucedidos en la Plaza Juárez, son un aviso a tiempo para que todos los actores de la sociedad se comprometan desde sus respectivas actividades, para formar un muro donde choque la entrada de la violencia como camino de solución a carencias o exigencias de solución, como se quiso intentar en el caso de los pobladores de Pueblo Nuevo, que de manera absurda cerraron la puerta del diálogo y prefirieron la agresión y los golpes, concediéndoles incluso que hubiera razones de cansancio por promesas no cumplidas, pero que tenían en esa reunión a la que mandaron al diablo, una fecha comprometida para el inicio de la obra que pedían con el presupuesto etiquetado para hacerla.
El hecho de que trajeran en los autobuses en que llegaron a la Plaza Juárez, tubos, palos y piedras, habla de que el acto violento, no fue fortuito ni salido de la nada, sino planeado, o por lo menos, un escenario que no los tomó de sorpresa y que estaba presupuestado dentro de lo posible, y que estaban preparados para ello, como quedó demostrado por la forma como actuaron, con el liderazgo de su dirigente.
El alcalde de Ixmiquilpan, en un discurso boletinado por su área de prensa, dice que no aprueba que se haya violentado la audiencia y lamenta los hechos, así como señala que no aprueba ese tipo de acciones, aunque también deja claro que no justifica el actuar de la policía y hace presente que está en constante comunicación con la Secretaría de Gobierno para que se aclaren las cosas y sean liberados los detenidos, una vez que se paguen los daños, que según este boletín, habrían causado los manifestantes y los granaderos.
Curioso boletín del señor alcalde, que una y otra vez ha sido señalado y ubicado en acciones de violencia, en que supuestamente encabeza reclamos de las comunidades, y provoca destrozos y daños a oficinas, por lo que ha creado una escuela, de la que los actos de Plaza Juárez parecen ser resultado.
Ahora será la ley la que hable, para que cada quien responda por sus actos.
No puede ser de otro modo.
EL ÚNICO CAMINO ES LA APLICACIÓN DE LA LEY
Se avecinan tiempos electorales difíciles, en que por primera vez Hidalgo será tierra de elecciones totales, en que se elegirán gobernador, alcaldes y diputados en un clima que no será nada fácil, y en el que sólo la aplicación de la ley puede ser el camino que le dé certeza al proceso y tranquilidad a un estado que, de otro modo, puede caer en la violencia, que puede tener su puerta en este hecho de la Plaza Juárez, que se debe cerrar con la aplicación de la ley de manera justa, en que ni se dé de más, ni se dé de menos.
EL VALLE, TIERRA EN QUE LA LEY CUENTA, PERO POQUITO…
El Valle del Mezquital es un caso en esto de la aplicación de la ley, pues se aplica pero “poquito” y en muchos casos, de acuerdo a lo que diga la población, que decide conforme a su criterio y a su capricho, dejando de lado el marco legal.
Dicen que son “usos y costumbres”, pero más bien son “abusos por costumbre”, de tal manera que lo que es ley en el estado, en el Valle no cuenta ni vale, porque en buena parte de esta zona de Hidalgo no vale, porque allí lo que cuenta es lo que diga la comunidad, lo que digan sus líderes, tal y como sucedió en la Plaza Juárez donde, pese a que el gobierno del estado les dijo que para terminada fecha se iniciaría la obra, dijeron que no, que no estaban de acuerdo porque ellos querían TODO Y AL INSTANTE, simplemente porque desde su punto de vista, era una obra que ya tenía mucho tiempo de espera, y ya estaba bueno que les vieran la cara.
De nada valió que se les explicara la situación del país, o que se les enterara de la carencia de dinero que hay en todo México, ellos querían su obra, pues de lo contrario iban a proceder como hacen en el valle, donde hacen valer su voluntad por la fuerza, tal y como les ha enseñado su maestro Charrez, y así procedieron con palos, tubos y piedras.
La policía, que tampoco son blancas palomas, reaccionaron, dicen que no de tan buena manera, y los alejaron.
Subieron a sus autobuses y partieron para Ixmiquilpan. Habían dejando una lección al gobierno, por no cumplir.
Pero más adelante los detuvieron. La información dice que fueron 40 personas las que deben enfrentar acusaciones por lo sucedido en la Plaza.
Es la única manera de frenar la violencia y de hacer valer el estado de derecho.
Aquí no vale eso de usos y costumbres.
Somos un estado donde hay leyes y todos estamos bajo su imperio.
Hacerlas valer le da seguridad a todos los ciudadanos, y por ello se deben cumplir sin excepciones.
Por eso trabajan los diputados y por eso se les elige.
Estamos a tiempo de frenar escenarios de violencia que asoman su cara en este hecho de la Plaza.
Estamos a tiempo…
