QUE TRABAJEN… LOS BURROS.
Es lo que parecen decir los diputados de Morena, que aunque cobran entre salario y apoyos extras unos 98 mil pesos al mes, no quieren hacer el trabajo al que están obligados por el cargo para el que los contrató el pueblo, pues los señores más por grilla que por razones, no asisten a las sesiones de trabajo sea de todos los legisladores o en las comisiones en las que están adscritos .
Simplemente no van y las sesiones adonde acuden los otros legisladores se tienen que suspender porque no hay quórum, concepto que defiende sobre todo en cuestiones parlamentarias un número suficiente de presentes para darle validez a lo que se acuerda o decida para que sea formalmente válido por el valor de su representatividad.
Los Morenos y particularmente los seudo morenos Sosistas, en más de una ocasión han provocado falta de quórum con su inasistencia a sesiones de Congreso o de comisiones , en una falta de respeto al resto de diputados, principalmente a los ciudadanos que se supone los eligieron para trabajar y dar resultados y no para la grilla barata que hacen cuando como dijo la diputada Jajaira: “algo no les acomoda y hacen la graciosa huida”, encabezados casi siempre por el ajonjolí de todos los moles Ricardo Baptista.
Y no cobran poco.
Usted mismo se puede preguntar en qué trabajo le pagan un salario de 48 mil pesos, más 30 mil pesos por el concepto de atención ciudadana, más 20 mil pesos por asistencia legislativa que da un total al mes de 98 mil pesos.
Y no obstante la buena billetiza, no quieren trabajar aunque eso sí disponen del dinero público como se les da la gana hasta el abuso, como el hecho de haberse asignado sólo para los morenos, más los que se les sumaron unos 750 millones de pesos, que disfrazaron de apoyos para municipios pobres, en una acción electorera que no pasó inadvertida para los otros diputados .
Y no es que trabajar asistiendo a las sesiones sea una decisión de buena voluntad de los diputados, es una obligación que se supone lo saben los que llegan al Congreso como lo señala la ley orgánica del Congreso en su artículo 30 donde se les indica y ordena: “asistir puntualmente a las sesiones del Congreso del estado, así como a las sesiones de las comisiones legislativas de que formen parte”. Y “permanecer en el salón de sesiones del pleno, de la diputación permanente o de las comisiones durante el desarrollo de las mismas”.
Sin embargo les vale y de acuerdo a sus intereses asisten o no, aunque se suspenda la sesión.
Cómo estará la situación que para obligarlos se aprobó la iniciativa de descontarles de su salario los días que no trabajen, aunque parece corta la pena , porque en esos cargos, quién no cumpla debe pedir licencia para que entre quien pueda cumplir con sus obligaciones.
Mientras tanto, hace unos días, todos los diputados de Morena no quisieron asistir a la sesión donde nueve partidos darían a conocer su propuesta de reforma electoral. Dijo el ajonjolí de todos los moles que porque había grupos de choque que nunca pudo probar. Antes, la Comisión de Hacienda canceló sesión , porque los Sosistas tuvieron a bien no asistir, pese a que estuvo esperando el Oficial Mayor del estado. No asistieron Rafael Garnica, Humberto Veras Godoy, Corina Martínez, Tatiana Ángeles y Doralicia MartíneZ, casi todos los garzas.
Y apenas hace unos días la Comisión de Igualdad de Género, dejó plantada a la titular del Instituto de las Mujeres Concepción Hernández Aragón, porque las garzas Corina Martínez, Tatiana Ángeles y Susana Araceli Ángeles no quisieron ir a la sesión.
No está mal para ellos, los Sosistas, cobrar cada mes casi cien mil pesos y hacer lo que se les ocurra, menos trabajar.
Antes se decía :” quien no trabaje, que no coma” y también el mandato bíblico “comerán con el sudor de tus frentes” o “a quien trabaja no le falta su paga”.
Pero eso era antes , porque en Hidalgo algunos diputados cobran bien, comen mejor y sólo hacen como que trabajan, pero sólo es grilla.
Al que le quede el saco, que se lo ponga.
