ALFIL NEGRO

GARZA ACORRALADA
RUMBO A LA JAULA
 

El caso de Gerardo Sosa y su Grupo Universidad es serio, de verdad serio, porque implica cuestionamientos graves sobre presunto lavado de dinero, conflicto de interés y un nuevo tema que se pudo sospechar pero del que no se decía nada: la venta de combustible, que por los hechos que se viven en el el país y el estado, sólo tiene una definición: que la UAEH a través de su Patronato esté inmiscuida en huachicoleo, que no es otra cosa que la  comercialización de gasolina robada a PEMEX en las gasolineras que tenga la casa de estudios, como lo hace notar El Universal en la columna “opinión” de Roberto Rock, con el título “Sobre la pista de Sosa Castelán”, del 23 de este mes de abril.
Pero no es sólo Sosa quien debe estar preocupado, porque pese a que es el patrón de todo el grupo, se debe suponer que la salpicadera le llega, o le debe llegar, a muchos de su grupo, beneficiados con cargos y dinero que ahora por lo menos se tiene la sospecha que es de origen dudoso, tan dudoso que Hacienda le congeló todas las cuentas bancarias, poniendo a salvo los pagos de nómina, para quitarle a este grupo lo que ya gritaba el elegante rector, diciendo que con este congelamiento se atentaba contra la vida de la Universidad, que no podría cumplir con sus obligaciones fundamentales lo que era casi un drama humanitario.
No, no es contra la Universidad la investigación y penalidades que pueden venir, ni contra los miles de alumnos, maestros y trabajadores que se pretende usar como carne de cañón por parte de Grupo de Sosa. Es contra el Grupo de Sosa, en el que deben estar alineados seguramente gente importante de la casa de estudios, quienes hayan sido rectores empezando por el actual, políticos como sus diputados y aliados que de muchas maneras pudieron ser beneficiados con estos negocios, poco claros, como las más de 20 empresas universitarias, se dice que hay constructoras y otras actividades de negocios.
Como señala el Universal en el sentido de que “hay múltiples evidencias de lavado de  dinero”, agregando que incluso la Fiscalía Nacional habría asegurado que el volumen de recursos detectados triangulados con bancos, desborda con mucho los manejos contables de la UAEH, que sólo se explicaría por un entramado financiero externo con las empresas( más de 20) presuntamente ligadas a Sosa.
Este es el caso de presunción que se plantea Hacienda y que ha golpeado tan severamente a un barco que como el Titanic, parecía que nadie podría hacerle daño y que le permitió a su dueño jugar, al parecer de mala manera, el juego del poder con un manejo, así denunciado, con bases de dudosa honorabilidad y la complicidad, se puede presumir de organizaciones, políticos, quizá maestros y acólitos que todo le justificaban, suponemos que por los beneficios económicos.
Y de poder que les repartía el jefe.
Pero al parecer hubo un error de cálculo, pensando que por haber apoyado a quien ganó tenía cartera abierta para todos sus planes, a lo mejor pensando que había comprado impunidad.
Sólo así se entienden sus acciones, apoyadas por sus fieles diputados, para tener un ataque de todos los días contra el Gobernador ansioso de revancha y de poder, sin entender que cada día que pasaba se alejaba del Presidente mientras que el Gobernador estaba cada vez más cerca por hechos y acciones responsables.
Y ahora el lío es muy grande, tanto que puede terminar con el imperio garza con escenarios insospechados por lo que dice Hacienda en el sentido de: PRESUNTOS ILÍCITOS DE CORRUPCIÓN, por lo que se tuvieron que bloquear cuentas DE PERSONAS VINCULADAS a la Universidad con las denuncias ya señaladas de corrupción, conflictos de interés y huachicoleo.
Es decir el asunto no es solo contra Sosa, sino contra otros que andan en el juego.
Vienen días de tormenta contra el Grupo Universidad y no dude usted, que más de una rata brinque del barco porque se hunde, porque el dinero y el temor no logra lealtades sino seguidores ventajosos atentos al tamaño del billete.
Esto apenas va caminando y lo ideal será que se actúe con justicia para todos.
Pero por lo que se ve, la Garza está acorralada y muy cerca de la jaula.
Es lo que se ve.

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